Pekín ha afirmado que el contencioso sobre el funcionamiento de la aplicación de vídeos TikTok en Estados Unidos debe resolverse mediante la cooperación entre las partes y de acuerdo con las leyes y regulaciones chinas. Así lo ha señalado este jueves la portavoz del Ministerio de Comercio, He Yongqian, tras las informaciones sobre posibles pactos de la plataforma con inversores para crear una nueva sociedad en EE. UU.
En declaraciones recogidas por las agencias, He Yongqian ha explicado que los equipos económicos de China y de Estados Unidos han llegado a un “consenso de marco básico” para encarrilar el caso de TikTok y ha añadido que el gobierno chino “espera que las empresas logren una solución de equilibrio de intereses”. La portavoz ha insistido en que cualquier salida al conflicto debe respetar la normativa china vigente.
He Yongqian también ha instado a Washington a “actuar en la misma dirección” que Pekín y a ofrecer a las empresas chinas un entorno “justo, abierto, transparente y no discriminatorio”. Según la portavoz, este enfoque ayudaría a “promover el desarrollo estable, saludable y sostenible de las relaciones económicas y comerciales” entre las dos potencias. Sin embargo, no ha facilitado detalles concretos sobre licencias tecnológicas, propiedad intelectual ni posibles calendarios.
Las declaraciones del Ministerio de Comercio llegan después de diversas informaciones difundidas tanto en China como en Estados Unidos sobre la arquitectura propuesta para la operativa de TikTok en el país norteamericano. Según un comunicado interno de ByteDance, matriz china de la plataforma, al que han aludido medios de los dos países, la empresa habría acordado vender sus operaciones en EE. UU. a un holding liderado por inversores estadounidenses.
Este esquema prevé una participación conjunta del 45 % para Oracle, Silver Lake y el fondo emiratí MGX; aproximadamente un 33 % para filiales de los principales inversores de ByteDance, y cerca de un 18 % para la propia ByteDance. De acuerdo con el documento, el acuerdo debería cerrarse el próximo 22 de enero, justo el día antes del plazo establecido para que el Departamento de Justicia suspenda las operaciones de TikTok en Estados Unidos si no se ha constituido una nueva empresa suficientemente desvinculada de ByteDance.
Este requisito deriva de una ley aprobada por el Congreso norteamericano en 2024, que alega motivos de seguridad nacional. La norma especifica que ByteDance no debe tener acceso a los servidores que almacenen los datos de los usuarios de la aplicación de vídeos cortos. El objetivo declarado de la legislación es evitar posibles riesgos relacionados con el uso y la protección de la información personal.
Tras regresar al poder el pasado enero, el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, prorrogó en diversas ocasiones la implementación de la ley para permitir que su Administración negociara la venta de las operaciones estadounidenses de TikTok. A finales de septiembre, Washington y Pekín anunciaron un marco de acuerdo para la operación, después de una serie de reuniones en las que también se abordó la guerra comercial entre ambas potencias.
Trump afirmó entonces que el acuerdo contaba con la “aprobación provisional” del presidente chino, Xi Jinping, y que debía completarse durante la reunión que ambos mandatarios celebraron el pasado octubre en Corea del Sur. Sin embargo, hasta ahora Pekín no ha ofrecido detalles sobre el pacto. El gobierno chino dispone de una llamada “acción de oro” en ByteDance, que le otorga derecho de veto sobre decisiones estratégicas de la empresa, un hecho que refuerza su posición a la hora de reclamar que cualquier acuerdo respete la legislación china.