El Ibex 35 está dejando alguna que otra sorpresa en los últimos compases del año. Goldaman Sachs, banco de inversión estadounidense, se erigió como el protagonista del principal índice bursátil nacional la semana pasada. La compañía americana abrió la semana convirtiéndose en el máximo accionista de BBVA y de Banco Santander. Goldman Sachs echaba la puerta abajo superando a otras grandes firmas de inversión como BlackRock, Norges Bank o Dodge & Cox, entre otras.

Dos días más tarde, el banco de inversión con sede en Nueva York volvía a ser noticia, pero esta vez por convertirse en el máximo accionista de Iberdrola. Tres grandes apuestas en menos de 72 horas. Goldman Sachs irrumpía en la parte alta del capital de tres de las cuatro compañías más valiosas del Ibex 35. Una apuesta no menor que se traduce en una valoración de las tres posiciones superior a los 10.200 millones de euros. Con esta apuesta, Goldman Sachs tiene capacidad para influir en más del 33% del Ibex 35.

¿Qué busca Goldman Sachs?

Una de las preguntas que más se hace el mercado es ¿por qué?, ¿tiene sentido que Goldman Sachs haga una apuesta de este calibre en un momento delicado para el mercado de valores? Y la respuesta es sí. Desde el punto de vista inversor, entrar con fuerza en el capital de tres compañías bien asentadas, que tienen una buena estructura financiera y que, por el momento actual, pueden crecer a nivel comercial, es una operación que a medio-largo plazo puede dar sus frutos.

Según Pablo García, director general de Alpha Value en Iberia y Latam, la intención de Goldman Sachs con esta apuesta es “diversificar”. “La situación se está poniendo compleja en Estados Unidos y en Europa, y tienes tres valores que, a priori, deberían hacerlo bien”, explica el experto. Por su parte, Antonio Castelo, analista de iBroker.es, comenta que la operación “no tiene ninguna particularidad especial, ya que, si miras la composición accionarial de las compañías más importantes, los principales accionistas son institucionales”.

Pablo García, director general de Alpha Value, explica que “se trata de movimientos estratégicos desde el punto de vista non core. Se basa en tener bien establecida la cartera de inversión, y las tres empresas han destacado under performance. En línea con lo que comenta Antonio Castelo, el director general de Alpha Value en Iberia y Latam cree que “no estamos ante la punta de un iceberg o que nos estamos perdiendo algo por detrás”.

Una inversión que “encaja bastante bien”

Desde el punto de vista bursátil, la operación puede sorprender puesto que son tres valores que no han destacado en el ejercicio. De hecho, hoy por hoy, Banco Santander muestra una depreciación del 7% en lo que va de año. BBVA e Iberdrola, pese a haber logrado conciliar la tendencia alcista en el conjunto anual, muestran apreciaciones ligeras. BBVA crece un 1% después de haber estado en negativo durante gran parte del ejercicio, mientras que Iberdrola se apunta un alza del 2% en lo que va de año.

Pese a ello, Pablo García apunta a que Goldman Sachs “no está invirtiendo en sectores delicados, como pueden serlo el real state o el retail”. “No son valores endeudados, y además tienen una situación de balance bastante sólida”, añade el director general de Alpha Value en Iberia y Latam. Es decir, pese a que los valores no muestran importantes alzas, ni tampoco han tenido una performance excesivamente positiva, sí que son valores sólidos e importantes en dos sectores que, según Pablo García, “encajan bien con cualquier inversión”.

Goldman Sachs apuesta por las empresas punteras

Otro punto que podría explicar la apuesta de Goldman Sachs es la ‘fortaleza’ que ha mostrado el Ibex 35 en el presente ejercicio. Pese a que el selectivo nacional no ha entablado la cotización positiva en lo que va de año, sí que ha resistido mejor que sus pares el azote inflacionario, y esto se debe a las alzas y al buen posicionamiento de las empresas del sector financiero y energético.

Y es que, sí hay dos sectores que han sido protagonistas en 2022, esos son el bancario y el de las utilities. El escenario actual les ha favorecido. La banca, en medio de subidas de tipos y contando con un potencial deterioro de la solvencia y un hipotético aumento de la mora, aumentará sus ingresos y dilatará márgenes. Por su lado, el energético, debido a la guerra en Ucrania, ha pasado a un primerísimo plano, sobre todo el de las renovables.

Y en estos sectores, BBVA y Santander son los dos bancos más grandes del país, mientras que Iberdrola es uno de los máximos exponentes a nivel global del sector de las renovables. Goldman Sachs ha apostado por opciones ‘seguras’, que tienen presencia a nivel internacional y una demarcación única en el mercado. “Es probable que Goldman Sachs haya querido invertir en los valores más representativos del índice”, detalla Antonio Castelo, analista de iBroker.es. Además, “el financiero, el telecom y las utilities son los sectores que más pesan en España”, tal y como explica Pablo García.

Goldman Sachs ha sorprendido haciéndose fuerte en tres de las compañías más importantes del selectivo nacional. Pese a que el momento del mercado no es favorable, y menos con las perspectivas económicas que los expertos ofrecen, el banco de inversión no ha dejado pasar la oportunidad de hacerse fuerte en dos de los sectores de mayor peso en el principal índice nacional. El buen reparto de la cartera de inversión, la buena demarcación en empresas punteras, y el buen porvenir de estas tres empresas, sobre todo en el plano comercial, son algunos de los motivos que han llevado a Goldman Sachs a crecer en la Bolsa española.