BBVA ganó 5.961 millones de euros entre enero y septiembre de este año, un 24,3% más, según informó el banco a la CNMV. Esta mejora, hasta cifras récord –como todo el sector en España– se debe a unos márgenes disparados gracias a las subidas de los tipos de interés y, también, a la falta de extraordinarios negativos, que sí tuvo en 2022 por la compra de 662 sucursales a Merlin, que restó 201 millones a su beneficio. Teniendo en cuenta extraordinarios, la mejora del resultado en los tres primeros trimestres fue del 19,3%.

El margen de intereses de BBVA creció un 29% hasta septiembre, hasta los 17.843 millones, mientras que los ingresos por comisiones se elevaron un 13,6%, hasta los 4.594 millones. El margen bruto fue de 22.104 millones, un 21,1% más pese al pago de 215 millones del impuesto extraordinario al sector bancario que pagó en el primer trimestre. Los gastos subieron un 18,1%, hasta los 9.241 millones, por lo que el margen neto creció un 23,3%.

El banco que preside Carlos Torres tiene el riesgo controlado aunque algunas ratios están empeorando ligeramente. El saldo de créditos dudosos subió 200 millones, hasta los 14.900 millones, si bien la tasa de morosidad bajó una décima al compararse con un mayor saldo activo de crédito. La tasa de cobertura de mora cedió un punto, hasta el 79%. El coste de riesgo está subiendo a causa de la subida de los tipos de interés y en un año se ha disparado 25 puntos básicos, hasta el 1,11%.

Si nos fijamos solo en España, los resultados de BBVA fueron de media mejores que en el resto de mercados en los que se encuentra, como Turquía y México. El beneficio atribuido en el Estado en los primeros nueve meses del año fue de 2.110 millones, un 61,9% más, pese al impuesto a la banca, gracias a una subida del 50,8% del margen de intereses y una mejora del 39% de la eficiencia.