"Si queréis ganaros muy bien la vida, sed un prompter". Esta es una declaración que ha pronunciado Jaume Rey, director general de Nexiona, en el marco del Congreso Internacional del AZFA, la Asociación de Zonas Francas de las Américas, que se ha celebrado en Barcelona con el DFactory de la Zona Franca como Usted de referencia mundial y bajo el paraguas del Consorcio de la Zona Franca de Barcelona.

El ejemplo de las zonas francas

El acontecimiento ha querido subrayar los mejores casos de zonas francas de todo el mundo, ya que también se ha celebrado conjuntamente el acontecimiento GASEZ de Naciones Unidas donde recoge las diferentes tecnologías aplicadas a la América Latina, pero también a Europa, Asia, África y los Estados Unidos. En la tormenta de ideas que se ha dado, el concepto de ingeniero de prompter ha tomado más fuerza que nunca. Rey apuesta que si previamente se ha hablado de "blockchain o metaverso, para citar algunos ejemplos, ahora toca la IA y lo único que hace falta es saber como entenderla y trabajarla". En un debate moderado por Gustavo González de Vega, representando del área estratégica de desarrollo económico del gobierno de las Canarias, se quitó hierro al hecho de que la IA pueda sacar puestos de trabajo: se apuesta más por la transformación y lo que se pide es ver cómo los programadores, ahora, tendrán que reformularse.

El camino que marca ChatGPT

La reformulación pasa por trabajos como esta. ¿Pero en qué consiste exactamente un ingeniero de prompter? Es aquel individuo que es capaz de hacer preguntas con una precisión muy estricta a ChatGPT para que pueda interpretar de forma adecuada aquellas demandas que se le están formulando. Precisamente, el éxito de esta herramienta es entender como establecer un correcto conocimiento con ella para optimizar al máximo sus resultados. Este trabajo irrumpe con fuerza y por una cuestión de novedad faltan manos y cerebros que puedan dar respuesta a la alta demanda.

¿Tienes habilidades lingüísticas?

Aunque casi cualquier persona puede hablar con un chatbot, hay una demanda creciente de profesionales que puedan diseñar sus indicaciones correctamente para alcanzar un objetivo concreto. La ingeniería rápida se ha convertido en una carrera prácticamente de un día para el otro durante los últimos meses, con personas cualificadas que ganan salarios fantásticos solo por sus habilidades lingüísticas. Así pues, en este artículo, echamos una ojeada más de cerca a la ingeniería rápida, como se ve y como puedes mejorarla para ganarte la vida.

La ingeniería rápida es una técnica que se utiliza para influir en una IA de lenguaje natural y hacer que cumpla una tarea con la máxima precisión posible. Un guía experimentado puede utilizar el razonamiento para ayudar a la IA a entender mejor la tarea. Sigue leyendo para obtener más información, incluidos algunos ejemplos del mundo real. Un ingeniero rápido puede referirse a cualquier persona que utilice palabras específicas, a veces en un orden específico, para extraer el máximo valor de una IA que entiende el lenguaje natural. Estas palabras no tienen que ser técnicas o complejas. Ni siquiera necesitad una formación en informática, de la misma manera que no necesitáis un título para ser competente en el uso de Google.

¿Cómo podéis aprender estos conocimientos y aspirar a ser un prompter? La buena noticia es que no necesitáis un título de ingeniero o formación, solo unas buenas habilidades lingüísticas. De hecho, una ingeniera rápida entrevistada por TIME dijo que su título de humanidades ayudó a elaborar mejores instrucciones y a comunicarse eficazmente con grandes modelos de lenguaje, ya que están construidos de manera efectiva para imitar a los humanos.

Algunos de estos cargos tienen salarios de hasta 375.000 dólares y no siempre requieren títulos en tecnología. Anthropic, una empresa de investigación y seguridad en inteligencia artificial, actualmente tiene un papel abierto para un "ingeniero y bibliotecario rápido" con un rango salarial entre 280.000 y 375.000 dólares, según informó por primera vez Bloomberg. Así pues, si escribes bien, es posible que quieras convertirte en un impulsor en la industria de ventas y marketing.