El Ministerio de Trabajo prevé cerrar de forma "inminente" un acuerdo con los agentes sociales para la reforma del subsidio de desempleo, a falta de concretar algunos detalles comprometidos verbalmente y a la espera de que los diferentes sindicatos y patronal lo sometan a aprobación interna. Después del rechazo del primer intento de reforma, que fue tumbado el mes de enero por el Congreso con los votos del PP, Vox y Podemos, el Gobierno no descarta volver a aprobar el texto de nuevo como decreto ley, con la confianza en que pasará el trámite en la cámara baja. El texto, que se está ultimando con la patronal y sindicatos, mejora la cuantía a percibir, amplía los colectivos beneficiarios y extiende la compatibilidad con el trabajo a la prestación contributiva de paro (no solo para el subsidio asistencial).

El Ministerio liderado por Yolanda Díaz se ha comprometido a enviar un nuevo texto con las incorporaciones reclamadas por los agentes sociales, que en caso de los sindicatos tienen que ver con garantías de control y evaluación del mecanismo de compatibilidad con el empleo, para que sea verdaderamente un instrumento para la inserción. Ahora se mantiene la cotización para la jubilación de los perceptores mayores de 52 años en el 125% de la base mínima vigente (equivalente al salario mínimo a cada momento), cuestión que supuso el rechazo de Podemos porque el texto primigenio recortaba este porcentaje al 100%.

La cuantía del subsidio equivale al 80% del indicador de rentas múltiples (IPREM), unos 480 euros en el mes, pero después de la reforma aumentará al 95% del IPREM (570 euros) los primeros seis meses, bajará al 90% en los seis meses siguientes y será del 80% como en la actualidad el resto del tiempo, hasta completar un máximo de 30 meses.

Con la nueva reforma, el subsidio se amplía a los siguientes colectivos

  • Menores de 45 años sin responsabilidades familiares.
     
  • Los trabajadores eventuales agrarios.
     
  • Las personas trabajadoras transfronterizas de Ceuta y Melilla.
     
  • Los que acrediten periodos cotizados inferiores a 6 meses y carezcan de responsabilidades familiares.

Víctimas de violencia

Después del diálogo social se ha abierto asimismo a trabajadores marroquíes con autorización de trabajo en territorio español que cumplan los requisitos, aunque ya no estén residiendo en España. También a mujeres víctimas de violencia de género o sexual y a los emigrantes retornados, que tendrán un subsidio propio con las mismas características y cuantía que el de paro.

Desde los sindicatos, Cristina Estévez (UGT) y Carlos Bravo (CCOO) han valorado positivamente los avances conseguidos en esta negociación porque mejora la protección por desempleo del nivel asistencial, incorporando nuevos colectivos, y sus cuantías, si bien entienden que la referencia de los subsidios (actualmente el Iprem) no es la más adecuada. Los representantes sindicales han asegurado que esperan recibir un nuevo texto en las próximas horas con las aportaciones realizadas en la reunión para someterlo a sus respectivos órganos de dirección.