El precio de la vivienda, tanto nueva como usada, se encareció un 3,3% en enero, el menor incremento interanual que se registra desde septiembre de 2021, según los datos difundidos este martes por la tasadora Tinsa. Por otro lado, la oferta de viviendas en venta aceleró su contracción al 8% durante el cuarto trimestre de 2023 en tasa interanual, una caída que contrasta con el 4% que registraba tres meses antes, según los datos que maneja el portal inmobiliario Idealista

La subida más destacada se dio en las islas, donde rozó el 9% (8,9%) con respecto a enero del pasado año. Un nuevo aumento que deja los precios en Canarias y Baleares solo un 3% por debajo de los máximos que registraron en los años del bum inmobiliario, entre 2007 y 2008. Tras las islas, los mayores incrementos de precios de la vivienda se registraron en la costa mediterránea (4,3%); en las capitales y grandes ciudades (2,9%) y en las áreas metropolitanas (2,8%). En el resto de los municipios, la vivienda se encareció un 2,1% en enero, informa Efe.

Según señala Tinsa, en enero continuó la estabilización de los precios residenciales en un contexto de desaceleración de las compraventas ante la contracción en el crédito hipotecario concedido tras las sucesivas subidas de los tipos de interés. No obstante, es la escasez de oferta la que continúa sosteniendo los precios, explica la directora del Servicio de Estudios de Tinsa, Cristina Arias. Y es que en 2023 las compraventas se financiaron en su mayoría con fondos propios, con un componente relevante de compraventas de extranjeros y un mantenimiento de las adquisiciones por parte de entidades jurídicas.

Discreta caída mensual

A pesar de la subida del 3,3% que se anotó la vivienda en tasa interanual, con respecto al mes anterior (diciembre) se anotó una discreta caída del 0,1%. En las áreas metropolitanas, la variación mensual arrojó un descenso del 0,3% y, en el resto, de los grupos analizados, la vivienda se encareció un 0,3% en las islas y un 0,2% en la costa mediterránea. Por su parte, en las capitales y grandes ciudades y en el resto de los municipios, el precio no varió con respecto a diciembre.

En este contexto de moderación de los precios, Arias subraya que no se perciben por el momento señales preocupantes sobre la salud de la demanda local, ya que el empleo sigue resistiendo y la "tasa de dudosidad" se mantiene en niveles moderados. Con estos valores, el precio de la vivienda nueva y usada está a un 18% de los máximos históricos que registró entre 2007 y 2008, con las islas muy cerca de alcanzarlos. Además, desde los mínimos que marcó en 2015 tras el pinchazo de la burbuja inmobiliaria, el precio de la vivienda se ha incrementado un 38,9%.

Ventas

Respecto a la oferta, se redujo de forma significativa en Palma de Mallorca y en Valencia (-17% en ambas ciudades), mientras que la reducción de 'stock' fue del 14% en Barcelona y del 13% en Alicante. Con un descenso de un solo dígito se encuentran Málaga (-8%), Madrid (-4%) y Sevilla (-2%). Precisamente, la falta de oferta es la que sigue manteniendo la subida de los precios pese al frenazo que experimentan las compraventas y la concesión de hipotecas tras las sucesivas subidas de los tipos de interés y el consecuente encarecimiento de la financiación que han provocado.

De acuerdo con los datos del portal inmobiliario, que suma más de 1,5 millones de anuncios, la mayoría de las capitales de provincia españolas tiene ahora menos viviendas en venta de las que había hace un año. La mayor reducción se registró en Zamora y Santander (-28%), seguidas de Ávila (-26%), Santa Cruz de Tenerife (-23%), Toledo (-22%), Ceuta y Granada (-20% en ambos casos). Aun así, en seis de ellas la oferta disponible aumentó: Cuenca (11%), Huesca (8%), Pontevedra (7%), Zaragoza (3%), San Sebastián (3%) y Pamplona (1%).

Por provincias

A nivel provincial, la situación fue similar en el último año, aunque con menos provincias que incrementaron su parque disponible. Zamora registra la mayor caída de oferta, con un 21%. En la Comunidad de Madrid la oferta se redujo un 5%, mientras que en la provincia de Barcelona cayó un 2%. Guipúzcoa, por su parte, incrementó su 'stock' de viviendas en venta un 5%, mismo incremento que el de Zaragoza, de acuerdo con Idealista.

Según la estadística oficial que elabora el Ministerio de Vivienda y Agenda Urbana, en 2022 (últimos datos disponibles) se contabilizaron 444.546 viviendas nuevas sin vender, con lo que frente a 2021 el 'stock' se redujo en 4.263 unidades (0,9% menos) y representó el 1,7 % sobre el parque total de viviendas. Catalunya y Comunidad Valenciana acapararon la mitad de la oferta. Desde los máximos de 2009, cuando tras el pinchazo de la burbuja inmobiliaria se registraban casi 650.000 viviendas nuevas sin vender, el excedente se ha reducido más de un 31%.