Un currículum, todavía a día de hoy, es efectivo. A pesar de todo, este también pasa por nuestro perfil público en las redes, qué decimos y cómo lo decimos; qué presentación gráfica hacemos del currículum; o si tenemos un videobook o un resumen en formato audiovisual más atractivo. A pesar de todo, el método tradicional de la edición en papel sigue siendo la máxima carta de presentación. Para asegurar que será un éxito es más interesante tener en cuenta qué no tenemos que decir. Estos son las 9 cosas que te recomendamos evitar.

1. Información de Bachillerato

Incluso si acabas de salir de la universidad y no tienes experiencia educativa adicional, no tendrías que incluir en tu currículum dónde has ido a la escuela secundaria. En cualquier caso, un empresario está buscando un título universitario, completar una escuela de comercio o incluso algunas clases universitarias. Omite la información de secundaria y empieza tu experiencia educativa con universidades, escuelas técnicas o similares.

2. Referencias

Si un empresario está interesado en ti, te pedirá referencias. Es por eso que no tendríais que incluir "Referencias disponibles a petición". Si lo hacéis, podrías fechar tu currículum y hacer perder interés, en vez de apostar por ampliar directamente la información en las secciones de tus habilidades o experiencias laborales.

3. Información personal

Los empresarios no pueden pedir determinados tipos de información personal durante una entrevista de trabajo, así que ¿por qué lo tendrías que ofrecer en tu currículum? No incluir: tu estado civil, la orientación sexual, las afiliaciones religiosas o políticas, el Número de la Seguridad Social o cualquier otra cosa que un posible empresario no pueda preguntar.

4. Tu edad

Aunque quizás no indiques explícitamente vuestra edad en tu currículum, hay otras maneras de revelar la edad que tienes realmente. Por ejemplo, puedes incluir el año que te graduaste en la universidad o citar una experiencia laboral de más de 30 años. Aunque los empresarios no pueden discriminar legalmente a un candidato por su edad, eso no quiere decir que no pase. Por lo tanto, si crees que la edad es o será una barrera en tu búsqueda de trabajo, mira tu currículum y comprueba si has dejado alguna señal reveladora de tu edad.

5. Tu dirección exacta

Los formatos de currículum más antiguos a menudo incluían una cabecera en la parte superior de la página que contenía el nombre, la dirección y la información de contacto del solicitante de trabajo. Pero ahora, no hay ninguna razón para incluir una dirección de casa, sobre todo si solicitáis un trabajo a distancia. Aunque algunos empresarios pueden necesitar saber dónde vives si el trabajo tiene un requisito de ubicación, ahora es una práctica habitual añadir solo la ciudad, el estado y el código postal donde resides. Olvidar vuestra dirección postal también puede evitar la posibilidad de robo de identidad, si vuestro currículum acaba donde no pertenece.

6. Un objetivo de carrera

El objetivo de tu solicitud de trabajo es sencillo: quieres encontrar trabajo. Aunque los objetivos profesionales fueron populares en un momento, ya no lo son. Si creéis que necesitáis uno, siempre podéis abordar este problema en vuestra carta de presentación. En vez de eso, utilizad este espacio para un resumen de calificaciones para ayudar al responsable de contratación a entender rápidamente qué aportaréis al cargo.

7. Vuestros contactos laborales actuales

Suponemos que estás buscando trabajo mientras todavía estás trabajando. Aseguraos de no incluir la información de contacto de vuestro trabajo actual (como el correo electrónico o el número de teléfono del trabajo) en vuestro currículum. Aunque es dudoso que un posible empresario utilice intencionadamente vuestro correo electrónico o vuestro número de teléfono del trabajo para contactaros, se pueden producir accidentes. Recordad que los empresarios pueden (y a veces lo hacen) leer vuestro correo electrónico y, potencialmente, tener acceso a vuestro correo de voz.

8. Vuestra dirección electrónica personal

Todos los solicitantes de trabajo tienen que tener al menos dos direcciones de correo electrónico: una con finalidades profesionales y otra personal. Solicitar un trabajo con la dirección de correo electrónico del gmail u hotmail personal no parece profesional y podría afectar negativamente a la percepción de un empresario de tu solicitud de trabajo. Utilizad una dirección de correo electrónico específicamente para la búsqueda de trabajo; de esta manera, nunca os perderéis un correo electrónico de una posible entrevista de trabajo.

9. Cada trabajo que has tenido, nunca

Si eres un graduado reciente, probablemente no tengas mucha experiencia, de manera que incluiréis la mayoría, sino todo, de vuestro historial laboral. De la misma manera, si sois un ejecutivo de nivel superior y habéis estado en el mismo sector durante décadas, es posible que queráis incluir todo vuestro historial laboral.

Sin embargo, para todos los otros, en general, no hace falta que enumeréis todos los trabajos que habéis tenido nunca. Los últimos 10 a 15 años de historia laboral son suficientes. La excepción podría ser si trabajasteis para una empresa muy conocida hace más de 10 años, o un trabajo más antiguo es relevante para un cambio de carrera que estáis haciendo ahora.