La tasa de morosidad bancaria está bajando a niveles que no se veían desde 2008. Contra todo pronóstico debido a la escalada de los tipos de interés en los últimos meses, con la consecuente subida del euríbor y la revisión al alza de los préstamos concedidos a tipo variable. Después del descenso en 655 millones de euros en el saldo de morosidad el pasado mes de junio, el primer semestre de 2023 se salda con una deuda crediticia a una tasa del 3,5%, su nivel más bajo en quince años, y un volumen de pagos dudosos de 42.173 millones de euros para el conjunto de la banca española. Según los datos hechos públicos este viernes por el Banco de España, este saldo es algo superior al mínimo registrado a cierre del primer semestre de 2008, 41.050 millones de euros, con una tasa del 3,37%.

El descenso de junio pone freno a dos meses de incrementos, y vuelva a niveles de marzo, cuando la tasa de morosidad había caído hasta el 3,51%, pero subió al 3,55% en abril y al 3,6% en mayo. En términos interanuales, la tasa de morosidad de los créditos concedidos en España ha descendido en 38 puntos básicos, desde el 3,88 % de junio de 2022. Por tipos de entidades, la morosidad de bancos, cajas y cooperativas de junio ha caído a un nivel incluso más bajo, hasta el 3,39%, diez décimas menos que en mayo pasado y hasta 41 puntos básicos por debajo del nivel de hace un año.

A este retroceso de la mora contribuyó el incremento de la cartera crediticia en su conjunto, que cerró la primera mitad del año por encima de los 1.205 billones de euros, frente a los casi 1.192 billones de mayo.

El descenso no se da a la par en los créditos al consumo. En este segmento, los créditos dudosos tienen un peso de hasta el 6,33% en la cartera crediticia de las financieras de consumo, 25 puntos básicos por debajo del nivel de mayo, pero casi el doble que la media nacional.

La evolución de la mora crediticia ha ido en paralelo a la coyuntura económica, de manera que en los años comprendidos entre 2004 y 2007 este porcentaje se mantuvo en términos generales por debajo del 1%, para luego ir subiendo paulatinamente hasta que a finales de 2013 superó el 13,6%. Luego emprendió una senda descendente que de momento continúa.