La Generalitat, a través del Instituto Catalán de Finanzas (ICF) ha ampliado en 35 millones de euros la línea de préstamos destinada a autónomos y empresas agrarias, agroalimentarias, forestales y del sector de la pesca afectadas por el incremento de los precios, la sequía y el cambio climático. Estos recursos se suman los 20 millones que ya se otorgaron por medio de misma línea ICF Agroliquidez, al inicio de 2024.

Esta línea de Agroliquidez se ha demostrado que es un instrumento útil para el sector de la agricultura y la pesca hasta el punto que de los recursos que se destinaron durante 2023 se ha agotado. En concreto, el ICF ha otorgado hasta ahora un total de 99,6 millones de euros a través de 1.588 préstamos. Esta suma representa, al mismo tiempo, más del 12% del total de 641 millones que la entidad ha otorgado en créditos, durante el último año. "Desde la banca pública de promoción hemos apoyado al campesinado del país en un contexto en que se ve afectada por|para múltiples crisis. Con esta nueva ampliación de 35 millones de euros, reforzamos nuestro apoyo|soporte y nuestra financiación en el sector primario como parte imprescindible del tejido productivo de Catalunya", ha destacado a la consejera|consellera delegada del ICF Vanessa Servera.

Por su parte, el secretario de Alimentación del Departamento de Acción Climática, Alimentación y Agenda Rural, Carmel Mòdol, ha subrayado que "todos somos conocedores que la actividad agroalimentaria está sujeta a muchos condicionantes que no dependen del propio sector, pero que lo afectan muy directamente, entre los cuales destacan los condicionantes de los mercados, los incrementos de costes de producción, y las inclemencias climatológicas. En reflexión conjunta con el sector se llegó a la conclusión que para facilitar la continuidad de esta actividad estratégica que es la producción de alimentos en estos momentos complicados convenía poner a disposición de ramaders/es, pescadors/es, pagesos/es, y otros actores del sector primario líneas de financiación que realmente representaran un apoyo|soporte claro y decidido en el sector".

La compleja situación que vive el campo ha hecho que la demanda de préstamos para mantener las actividades haya crecido exponencialmente durante 2023 y que continúe en lo que llevamos|traemos de 2024. De hecho, según los datos del ICF, en el último año, se ha triplicado el peso de este segmento de empresas sobre el total de las que han acudido al ICF. Entre 2022 y 2023, el número de compañías que han recibido financiación ha pasado de las 499 a las 1.657, y un 75% de estas han sido las 1.236 del sector agroalimentario.

A tipo fijo del 4% y a 3 y 6 años

Como en los recursos destinados anteriormente a la línea de ICF Agroliquidez, los préstamos serán a un tipo de interés fijo del 4%, pero se contará en todos los casos con una bonificación del 50% por parte del Departamento de Acción Climática, Alimentación y Agenda Rural, de manera que el tipo de interés final estará fijo del 2%. El plazo de devolución será de 3 a 6 años, con hasta 2 años de carencia incluidos. Además, cada operación aprobada será de un importe mínimo de 10.000 euros y un máximo de 100.000 euros. Como novedad, aquellos solicitantes que hubieran formalizado un préstamo en el marco de esta línea, podrán solicitar más financiación hasta llegar a un total de 150.000 euros. Es decir, si ya tenían un préstamo de 100.000 euros, podrá solicitar como máximo 50.000 más.