En la Unión Europea había 156 millones de personas entre 50 y 74 años que cobraron en 2023 algún tipo de pensión ligada a la jubilación -ya sea pública o privada, como fondos de pensiones privados o de empresa-, de invalidez o incluso ambas a la vez. Lo que supone casi uno de cada dos residentes, en concreto el 45,1% del total del segmento en esa edad, según los últimos datos publicado por Eurostat. En su mayoría, el 39,7% de ese 45,1%, eran pensiones ligadas a la jubilación -ya sea una pensión pública o procedentes de fondos y planes de pensiones-, el 4,6% eran pensiones de invalidez y otro 0,8% una combinación de ambas. Lo que no implica que estén necesariamente jubilados y dejen de trabajar, pues legalmente se puede compaginar la pensión -privada o pública- con algún tipo de actividad.

Pues bien, España se coloca a la cola de los 27 estados, pues solo el 30% de las personas entre los 50 y los 74 años cobran una pensión. Diez países comunitarios están por encima del 50%, con Polonia, con un 55%, a la cabeza. En España, con los datos de la oficina de estadística de la Unión Europea, hay unos 15,4 millones de personas que cobran pensiones -públicas y privadas ligadas a jubilación-, o de invalidez.

¿Por qué en España está a la cola en el número de personas que cobra una pensión? Varias son las razones que esgrime Eurostat en el análisis que ha publicado recientemente con los datos de la encuesta elaborada para conocer la situación en Europa en 2023. Varios son los motivos:

Mujeres sin pensión

El principal es que un alto porcentaje de personas no han cotizado en España lo suficiente para recibir una pensión de jubilación, ni han tenido capacidad económica para costearse un plan privado de pensiones. Un colectivo muy ligado a las mujeres. Así, el análisis de Eurostat señala que “en España, la razón principal de la baja proporción de pensionistas es la importante proporción de personas de 70-74 años que no reciben ninguna pensión, con aproximadamente una cuarta parte de este grupo de edad que no percibe ninguna pensión. Esto sugiere que un número considerable de personas en España no tienen derecho a percibir una pensión”.

Pensiones privadas

Una segunda causa es la escasa penetración de los planes privados de pensiones o los colectivos de empresas, pues en España las empresas que ofrecen fondos de pensiones a sus trabajadores son escasas en comparación con otros países europeos. Eurostat señala que hay un grupo de 13 países -Austria, Bulgaria, Croacia, Francia, Grecia, Hungría, Italia, Malta, Polonia, Rumania, Eslovaquia, Eslovenia y España- que se caracteriza por una baja proporción de personas que perciben pensiones profesionales (planes de empresa) o personales sin pensión obligatoria y una baja edad de jubilación. “Una baja proporción de personas de este grupo sigue trabajando, y la mayoría de los que dejan de trabajar lo hacen porque han alcanzado el derecho a la pensión”. En España, tan solo el 10% de las personas que reciben una pensión es privada, y el 90% es una prestación pública.

Edad real de jubilación

Otra causa que explica el porqué España está en la cola en cuanto a personas entre 50 y 74 años con alguna pensión es la tendencia creciente desde la reforma de las pensiones de retrasar la edad de jubilación y la caída de la jubilación anticipada antes de la edad legal. La edad media de jubilación en la Unión Europea era de 61,3 años en 2023, 2,1 años más que en 2012. Alrededor de dos tercios de los pensionistas se jubilaron entre los 60 y los 65 años. En España, la edad media de jubilación fue en 2023, los 63,1 años, la misma que en Irlanda, por detrás de los nórdicos Suecia y Dinamarca y Países Bajos. Algo que tiene que ver con que solo hay 5 países que tienen la edad legal de jubilación en los 67 años o cerca, como es el caso de España (66 años y 4 meses en 2024 y 6 meses en 2025).