El Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico ha aprobado una ampliación presupuestaria para el Plan Moves III de 2025. Se trata de una inyección adicional de 400 millones de euros, una cifra que iguala exactamente la dotación inicial total con la que arrancó el plan este año. Este movimiento duplica, de hecho, el esfuerzo presupuestario dedicado a las ayudas a la compra para este ejercicio, llevando el total a 800 millones de euros. La medida responde a que la transición hacia la movilidad electrificada está avanzando a un ritmo mucho más sostenido de lo que preveían los escenarios más optimistas. Según los datos de venta consolidados de los primeros meses de 2025, la cuota de mercado conjunta de los vehículos exclusivamente eléctricos y los híbridos ya ha superado la barrera simbólica del 20%.

Esta aceleración en la aceptación por parte de los ciudadanos ha provocado un efecto en cadena: la mayoría de las administraciones autonómicas, encargadas de la gestión operativa de las subvenciones del Moves III, agotaron los fondos que tenían asignados en tiempo récord, dejando un reguero de solicitudes aprobadas pero sin cobro y una larga lista de espera de nuevos aspirantes.

Las estimaciones de las asociaciones sectoriales del automóvil dibujan con precisión el alcance del problema. Se calcula que alrededor de 40.000 personas tienen sus solicitudes aceptadas, pero a la espera de la transferencia. El desembolso pendiente para cubrir estas ayudas, ya comprometidas, se eleva aproximadamente a los 300 millones de euros. La ampliación anunciada, por tanto, no solo servirá para saldar esta deuda emergente con los ciudadanos, sino que también dejará un margen de aproximadamente 100 millones de euros para atender nuevas peticiones y evitar la formación de una nueva lista de espera hasta el agotamiento definitivo del plan.

El horizonte 2026 y un cambio en el modelo de gestión

Esta ampliación del Moves III se produce en un contexto de transición hacia un nuevo marco de ayudas. El próximo año 2026 está previsto que entre en vigor el Plan Auto+, un programa integrado dentro de la estrategia más amplia del Plan Auto 2030. Este nuevo plan contará también con una dotación inicial de 400 millones de euros. Sin embargo, el ministro de Industria y Turismo, Jordi Hereu, ha dejado claro que el Auto+ estaba diseñado para la "demanda presente y futura" de 2026, y que, por lo tanto, no asumiría el pasivo de las listas de espera generadas por el Moves III.

Esta declaración ha generado una cierta incertidumbre sobre cómo se resolvería el impago existente. La decisión tomada ahora por el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico resuelve explícitamente este vacío. Los 400 millones adicionales son el último y necesario impulso al Moves III para cerrar su ciclo con éxito y garantizar que ningún comprador que haya confiado en las ayudas anunciadas se vea perjudicado por el exceso de demanda

Además, el Plan Auto+ incorporará una innovación importante en el modelo de gestión. A diferencia del Moves III, sus fondos serán administrados directamente por el gobierno español y no a través de las comunidades autónomas. El objetivo declarado de este cambio es doble: asegurar más homogeneidad en los criterios de aplicación en todo el territorio estatal y, sobre todo, conseguir una mayor agilidad y velocidad en la tramitación y el pago. En definitiva, la duplicación presupuestaria del Moves III representa un reconocimiento institucional al ritmo vertiginoso de la transición ecológica en el sector del transporte privado. Es un esfuerzo fiscal para consolidar un cambio de paradigma que ya es palpable en los aparcamientos y en las calles, y para dar certeza a los miles de ciudadanos que han decidido dar el paso hacia la movilidad cero emisiones en un contexto económico complejo.