El Banco Central Europeo (BCE) ha vuelto a subir los tipos de interés en 25 puntos básicos. El organismo central presidido por Christine Lagarde acomete la novena subida consecutiva de este ciclo de endurecimiento monetario que comenzó el verano del año pasado y sitúa el precio del dinero de la eurozona en el 4,25%.

De este modo, los tipos de interés se sitúan en el 4,25%, mientras que la tasa de depósito alcanza el 3,75% y la de la facilidad de préstamo el 4,50%. La entidad continúa con su estrategia restrictiva para estabilizar los precios, con el objetivo de reducir la inflación en la eurozona al 2%.

"La inflación sigue descendiendo, pero aún se espera que permanezca demasiado alta durante demasiado tiempo. El Consejo de Gobierno está decidido a que la inflación vuelva a su objetivo de medio plazo del 2% en el momento oportuno. Por lo tanto, hoy decidió subir los tres tipos de interés clave del BCE en 25 puntos básicos", ha señalado el organismo en un comunicado.

Actualmente, la tasa de inflación interanual de la eurozona se sitúa en el 5,5%, tras haberse reducido en seis décimas en el mes de junio respecto a mayo. Se trata del menor encarecimiento de los precios desde enero de 2022. No obstante, la tasa subyacente, que no tiene en cuenta la volatilidad de la energía y de los alimentos frescos, se aceleró dos décimas, hasta el 5,5%.

En cuanto al crecimiento económico, el producto interior bruto (PIB) de la eurozona no registró crecimiento alguno en el primer trimestre de 2023 respecto de los tres meses anteriores, cuando la actividad en la región se contrajo un 0,1%. Los últimos datos publicados por Eurostat, que mejoró en una décima la lectura del dato de enero a marzo en su revisión, reflejan que la eurozona esquivó por la mínima su entrada en recesión técnica.

A través de esta última subida, la novena consecutiva del precio del dinero y que lo ha hecho situarse en su nivel más alto en 16 años, el BCE ha cumplido un año completo desde que comenzó el actual ciclo de endurecimiento de su política monetaria.

Pendiente de la inflación subyacente

"Los acontecimientos desde la última reunión respaldan la expectativa de que la inflación seguirá cayendo durante el resto del año, pero se mantendrá por encima del objetivo durante un período prolongado", asegura el BCE. En este sentido, el banco explica que si bien algunas medidas muestran signos de relajación, la inflación subyacente sigue siendo alta en general. 

No obstante, destaca que las subidas de tipos llevadas a cabo se siguen transmitiendo con fuerza, endureciendo las condiciones de financiación y "están frenando cada vez más la demanda, lo que es un factor importante para que la inflación vuelva a la meta". 

La entidad central señala que continuará basándose en los datos económicos para determinar el nivel y la duración apropiados de la restricción monetaria de este ciclo. "En particular, sus decisiones sobre tipos de interés seguirán basándose en su evaluación de las perspectivas de inflación a la luz de los datos económicos y financieros que se reciban, la dinámica de la inflación subyacente y la solidez de la transmisión de la política monetaria", agrega.

Por otro lado, el Consejo de Gobierno del BCE también ha decidido fijar la remuneración de las reservas mínimas en el 0%. Según explica, esta decisión preservará la efectividad de la política monetaria, manteniendo el grado de control actual sobre la orientación de la política monetaria y asegurando la transmisión plena de las decisiones sobre los tipos de interés a los mercados monetarios. Al mismo tiempo, considera que mejorará la eficiencia de la política monetaria al reducir el importe total de intereses que debe pagarse por las reservas a fin de aplicar la orientación adecuada.