El jueves y viernes han supuesto un paréntesis de los episodios de calor sucesivos que han afectado a Catalunya durante el mes de junio. Esta situación cambiará radicalmente de cara al fin de semana: Catalunya hervirá con un nuevo latigazo de calor que disparará los termómetros en todas partes y no parece que estos quieran bajar a corto plazo. La primera ola de calor del 2025 se caracterizará por su extensión y duración, ya que afectará a toda a la península Ibérica durante un periodo bastante largo. Se superarán ampliamente los 40 °C en muchos puntos del sur y el interior peninsular durante 4 o 5 días, dejando temperaturas récord debido a la precocidad de esta canícula. En Catalunya tendremos el pico de calor durante el próximo lunes, cuando muchos puntos de la franja de Ponent podrán medir máximas de 41 o 42 °C, mientras que ciudades como Manresa, Vic o Girona también rozarán en los 40 °C. El agua del mar sobrecalentada agravará la situación en el litoral, donde será habitual romper la barrera de los 32 °C y el bochorno será insoportable. ¿Cuándo acabará esta ola de calor? ¿Volverán las tormentas en el Pirineo? En el siguiente vídeo te lo explicamos:

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Pistoletazo de salida de la ola de calor

La previsión del tiempo para este fin de semana está protagonizada por un fuerte aumento de la temperatura en todas partes. El sábado se presenta como una jornada de tiempo estable y cielos claros, con el permiso de algunas nubes bajas que se formarán durante la madrugada en el sector sur del litoral. De cara a la tarde, el calor intenso permitirá el crecimiento de nubarrones en el Pirineo que podrían dejar algunas gotas en el sector central y occidental de la cordillera, pero que no irán acompañados de las habituales granizadas de este mes de junio. En el resto del territorio, el sol picará de lo lindo y nos tendremos que resguardar durante las horas centrales del día. Viento de marinada suave en toda la costa, que se podría intensificar durante la tarde en el Delta del Ebro. El calor empezará a escalar desde bien temprano, especialmente en los pueblos y ciudades de interior, que mañana ya podrían superar los 37 °C de máxima. Las temperaturas mínimas también estarán al alza, dejando un nuevo festival de noches tropicales en el litoral. Destaca el norte de la Costa Brava, donde el termómetro no querrá bajar de los 26 °C en toda la noche. La previsión para el domingo anuncia una jornada muy parecida a la del día anterior. Día claro con algunas nubes delgadas, con la novedad de la llegada del polvo sahariano que dejará un cielo turbio. Se repetirán los chaparrones en la mitad oeste del Pirineo, pudiendo hacer acto de presencia algunos truenos el sector más occidental. Viento de marinada muy suave en la costa que no ayudará a mejorar la sensación térmica de aquellos que quieran disfrutar de un día de playa: el bochorno será protagonista en todo el litoral. Temperaturas disparadas en todas partes, destacando los más de 36 °C que se registrarán en las comarcas de Osona, la Garrotxa o el Pla de l'Estany.

 

Calor infernal y vuelven las tormentas

El lunes será el día más caluroso de la ola de calor que afectará a Catalunya los próximos días. Los termómetros se desbocarán por encima de los 40 °C en muchos puntos del interior del territorio. Las noches tropicales también serán habituales en la franja de Ponent y la depresión central, mientras que en los valles del Pirineo será más fácil dormir. En la costa, las elevadas temperaturas del mar Mediterráneo no permitirán que las mínimas bajen de los 26 °C, dejando una nueva temporada de noches tórridas de no pegar ojo hasta nuevo aviso. En estas regiones, las máximas oscilarán entre los 33 y los 36 °C y el bochorno intenso nos hará sudar desde primera hora de la mañana. Este calor intenso permitirá que se vuelvan a formar las tormentas de tarde en el Pirineo, que podrían dejar algún chaparrón importante acompañado de tiempo violento a las comarcas de la Cerdanya y el Ripollès, pudiendo extenderse hacia el Berguedà de cara a la noche. Cielos claros y sol por la mañana en todo el territorio, mientras que los yunques de las tormentas podrían soltar algunas nubes delgadas en la mitad norte por la tarde. El martes se presenta como una jornada calcada a la del lunes, con la novedad de que las tormentas podrían llegar a las comarcas de interior. La temperatura bajará ligeramente, pero seguiremos con valores muy por encima de la media de esta época. Parece que el miércoles podría ser el último día de la ola de calor, ya que la llegada de una vaguada a la península Ibérica frenaría el mercurio de cara a la segunda mitad de la semana. La combinación del aire frío en altura y un ambiente recalentado parece la receta ideal para el desarrollo de tormentas violentas en el Pirineo a partir del jueves.

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