El martes 15 de julio empieza la canícula en Catalunya y lo hará con temperaturas en la media climática, es decir, con el calor que corresponde por las fechas, sin estridencias. Después de una segunda semana de julio muy suave y con tormentas refrescantes, el grifo se cerrará y un superanticiclón dejará un tiempo de verano y playa con mucha monotonía. El verano enseñará los dientes, pero, ¿tendremos calores u olas de calor este julio? ¿Cuándo volverá a llover? En el siguiente vídeo te explicamos qué tiempo hará y te enseñamos un estudio sobre la preocupante disminución de la tramontana en el Empordà los últimos años:

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Sol y moscas

La previsión del tiempo para el martes anuncia un día espléndido con calma y bonanza en Catalunya y sin complicaciones meteorológicas. Cielo despejado en conjunto, sobre todo en las franjas horarias de la mañana. A partir del mediodía crecerán algunas nubes de evolución en los Pirineos y en las comarcas del nordeste, pero en principio serán poco gruesas y no esperamos grandes tormentas, quizás algún chubasco muy aislado en las montañas del Pirineo oriental, poca cosa si es que cae. Viento de marinada en general y un poco de tramontana en el Alt Empordà que mantendrá el mar algo removido en la Costa Brava con áreas de marejada. Temperatura canicular con calor de pleno verano que presentará pocos cambios en comparación con días atrás. Máximas de 30ºC a 35ºC en conjunto y volverán las noches tropicales en muchos pueblos y ciudades de Catalunya, sobre todo del prelitoral y la costa. También podría caer alguna mínima tórrida en los barrios céntricos de Barcelona con más isla de calor, cuando la temperatura no baja de los 25ºC.

Tiempo monótono y pesado

El miércoles, el jueves y el viernes se repetirá la misma jugada que el martes con estabilidad, muchos ratos de sol y pocas nubes. Quizás pueden aparecer algunas nubes bajas decorativas en la costa para hacer bonito, pero no esperamos lluvia ninguno de los tres días. La monotonía anticiclónica será la protagonista con una atmósfera pesada y poco fluida. Las temperaturas tampoco presentarán cambios significativos y el ambiente será veraniego y caluroso, como corresponde por las fechas, de momento soportable y sin exageraciones. El fin de semana, como novedad, podría aproximarse una vaguada muy descafeinada o nada activa que dejaría un aumento de las nubes de cara al sábado con algunos chubascos y tormentas en el Pirineo y en zonas próximas. La temperatura podría retroceder ligeramente, pero sin llegar a suavizarse del todo. El domingo todavía podrían quedar restos de inestabilidad con los clásicos truenos de tarde en puntos de montaña. Fuera de los Pirineos no se esperan cambios de tiempo ni tampoco chaparrones.

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