Historias para no dormir, y más si se refieren a la gasolina o el gasóleo, hay para dar y vender; pero la OCU, entidad de referencia en España en lo que a consumo se refiere, ha querido acabar en este mes de diciembre con una de las que más habitualmente se explican en las mil y una cenas (especialmente las familiares) de estos días: no es cierto que el combustible que se vende en las gasolineras low cost sea peor.
Cumple los estándares
Para comprobar si hay algo de cierto en los agoreros relatos que predicen averías graves en los motores de los coches de quienes prefieren llenar el depósito ahorrándose unos euros, la OCU ha analizado el combustible que se vende en las gasolineras low cost más frecuentadas. La conclusión es clara: todo el combustible que se expende en ellas cumple con los estándares mínimos de calidad.
¿Y el combustible premium?
Queda, sin embargo, una pregunta. Si el combustible low cost, con el que se pueden ahorrar hasta más de diez céntimos por litro, no daña el motor, ¿sirve para algo el combustible premium? Pues, también según la OCU, sí; pero los beneficios se detectan a muy largo plazo y, además, son difíciles de comprobar. En pruebas realizadas en Portugal durante cortos espacios de tiempo, se ha comprobado que el combustible premium no vacuna el motor contra averías ni le permite ofrecer más rendimiento. Hay, eso sí, otros beneficios subjetivos que tienen que ver con intangibles como la proyección social, la autosatisfacción o el servicio que se recibe en la gasolinera al repostar pero eso, lo que es a tu coche, le da igual.