Casi una cuarta parte: el porcentaje cubierto con fuentes renovables sobre el consumo final bruto de energía en toda la UE supuso un 23% al acabar 2022. Eurostat, la oficina estadística de la UE acaba de hacer públicos los datos completos del año pasado. Los de este 2023 se conocerán en diciembre de 2024.. En comparación con 2021, esto representa un aumento de 1,1 puntos porcentuales. España, pese a ciertos discursos, queda por debajo de la media aunuqe, debe reconocerse, por muy poco.

Torres eléctricas, luz, precio electricidad tope del gas vigor Ourense Castrelo de Miño tendido eléctrico / Foto: Efe
 

Los países escandinavos, en cabeza

Suecia se sitúa a la cabeza de los países de la UE, con casi dos tercios (66,0%) de su consumo final bruto de energía en 2022 procedente de fuentes renovables. Le sigue Finlandia (47,9%), que también recurre a la hidráulica, la eólica y los biocombustibles sólidos, por delante de Letonia (43,3%), que depende sobre todo de la hidráulica. Dinamarca (41,6%), seguida de Estonia (38,5%), obtuvieron la mayor parte de las renovables de la eólica y los biocombustibles sólidos. Portugal (34,7%) recurrió a los biocombustibles sólidos, la energía eólica, la hidráulica y las bombas de calor, mientras que Austria (33,8%) utilizó sobre todo la hidráulica y los biocombustibles sólidos.

¿Y España?

Las proporciones más bajas de energías renovables se registraron en Irlanda (13,1%), Malta (13,4%), Bélgica (13,8%) y Luxemburgo (14,4%). En total, 17 de los 27 miembros de la UE declararon porcentajes inferiores a la media comunitaria del 23,0% en 2022. Entre ellos, y pese al discurso favorable a las energías consideradas verdes del actual Gobierno de España, nuestro país quedó por debajo de la media con un 22,1%.