Lo llevan todos los coches que circulan por España –a no ser que su propietario se lo haya quitado, que de todo hay- y, desde hace unos meses, es uno de los objetos de deseo de los amigos de lo ajeno. Ahora que ya no pueden robar radios, prefieren esta pieza y es normal: contiene metales preciosos.

Catalizador 1
 

¿Para qué sirve el catalizador?

El catalizador forma parte del sistema de evacuación de gases de tu vehículo y es, en sí, un filtro. Al pasar por él, los gases nocivos(óxido de nitrógeno o monóxido de carboo,m entre otros) que emite el motor del vehículo se neutralizan en parte y los convierten en otros compuestos inocuos (nitrógeno y vapor de agua) o menos perjudiciales (dióxido de carbono). El proceso por el que esta conversión tiene lugar se denomina catálisis y permite transformar hasta el 98% de los gases altamente contaminantes que se generan en un proceso de combustión. Para que la catálisis sea posible, hace falta que el catalizador alcance entre 400 y 700 grados y, por eso, se sitúa cerca del motor y del tubo de escape. Esta circunstancia hace que su localización y extracción sea relativamente fácil si el ladrón en hábil y dispone de herramientas y tiempo.

Metales preciosos

Si lo abriésemos, en el interior del catalizador encontraríamos una matriz cerámica en forma de panel impregnada de una resina elaborada con metales nobles como el paladio, el platino o el rodio. La cantidad de platino, por ejemplo, puede alcanzar los cinco gramos y un gramo de este metal cuesta unos treinta euros. Si te sustraen el catalizador, eso sí, la broma te saldrá más cara: instalar uno nuevo puede llegar a costar entre materiales y mano de obra hasta mil euros. Circular sin catalizador –hay gente que lo retira porque considera que, con él, el coche pierde potencia- es motivo de sanción.