En torno a un millar de trabajadores de las empresas de alquiler de vehículos con conductor (VTC) se han movilizado este viernes para pedir una reunión con el presidente Quim Torra. La manifestación -que ha empezado en la plaza Francesc Macià- ha llegado hasta las puertas del Palau de la Generalitat, donde los portavoces de los conductores se han reunido con el gabinete de Presidència.
La marcha ha empezado sobre las once y media de la mañana y ha recorrido la Diagonal hasta llegar a la altura del passeig de Gràcia. Allí han empezado a descender camino de la plaza Sant Jaume y bajo las consignas de "Queremos trabajar" y "Nosotros damos agua, no tiramos piedras", en referencia a los repetidos ataques que sufrieron algunos VTC por parte de un grupo de taxistas durante la huelga.
Toda la protesta ha transcurrido sin incidentes, a pesar de la presencia de numerosos taxistas a lo largo del camino, y el millar de manifestantes se ha desplazado en todo momento por la acera sin cortar el tráfico, incluso deteniéndose en cada semáforo en rojo.
Una vez en la plaza Sant Jaume, los portavoces del grupo Vector -que engloba aproximadamente un millar de conductores- han tomado la palabra y han pedido a la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, que rectificara y aceptara reunirse a los representantes de los conductores.
"No nos han querido recibir", aseguraba Fernando Gatell, director general de Vector, quien lamentaba la falta de sensibilidad por parte del consistorio. En cambio, los portavoces sí que han podido entrar en el Palau de la Generalitat, donde se han reunido con el jefe del gabinete de Presidència. "Hemos pedido una reunión con el presidente Torra", explicaba Carles Segarra, uno de los portavoces de los conductores que ha estado presente en el encuentro.
Segarra ha celebrado que el Gobierno aceptara recibirlos y ha señalado que en los próximos días se celebrará esta reunión con el presidente o bien con la consellera de la Presidència, Elsa Artadi.
Los conductores, que siguen ocupando dos carriles de la Diagonal con sus coches, han emprendido una marcha a pie hasta la plaza de Sant Jaume después de que ayer la patronal del sector Unauto considerara que el Gobierno cedió al "chantaje del taxi" con la aprobación de un decreto ley que. A opinión de las VTC, "nos obliga a marcharnos".