El humorista catalán Peyu no es ningún extraño a la polémica, ni tampoco a la censura. Según ha hecho público este domingo la delegación de la Asamblea (ANC) en Sant Esteve Sesrovires (Baix Llobregat), el Ayuntamiento del municipio "vetó" la actuación que el humorista tenía prevista para ayer el sábado. En rechazo a esta decisión, decenas de vecinos se concentraron en la plaza XicMateu y proyectaron vídeos humorísticos de Peyu en una pantalla. Así lo ha explicado la Asamblea en un tuit publicado este domingo. En reacción a eso, el mismo Peyu ha retuiteado el mensaje como muestra de agradecimiento.

"La reacción del pueblo"

Ante el veto que dicen impuso el Ayuntamiento de Sant Esteve Sesrovires, gobernado por el PSC y Ciudadanos, al polémico humorista, "la reacción del pueblo fue espectacular: en la plaza XicMateu se "improvisó" unas proyecciones de sus últimos gags", ha detallado la Asamblea en un mensaje en Twitter. La convocatoria al acto dirigido al Ayuntamiento decía: "No nos gustan los vetos. No queréis a Peyu... dos tazas". Tal como se puede apreciar en las imágenes, el resultado fue un grupo de vecinos que pudieron disfrutar de los chistes del humorista, aunque a través de una pantalla.

TUIT @anc sus projeccio peyu

El gallardo español

El humorista Peyu, muy conocido por sus apariciones a programas como el APM de TV3El matí i la mare que el va parir de Ràdio Flaixbac, el Fricandó matinal de RAC 105 o el Versió Rac 1, lleva a Barcelona el espectáculo El gallardo español, que ya ha sido representado en varias localidades de Catalunya. Se trata de una obra de teatro de humor ácido que toca temas de máxima actualidad, como la manipulación de los medios, el racismo y la crisis de los refugiados, pero que tiene como eje central la represión y la censura que se vive en el Estado español. Aunque este espectáculo está interpretado en clave catalana, no renuncia a hacer incisivos retratos de otros asuntos que afectan al conjunto de la humanidad. Algunos personajes de Peyu comparten la homofobia y el racismo de tantos miembros de nuestra sociedad (y de muchas otras). El ensañamiento morboso de la prensa rosa en los sucesos más truculentos, el cuidado exagerado de niños que son tratados como si fueran huevos, el rechazo a los extranjeros... La obra llega en su punto más emotivo con la crítica a la inacción general delante la crisis de los refugiados en el Mediterráneo y a la muerte de los niños que intentan huir de sus países cruzando el mar.

 

Foto principal: vecinos de Sant Esteve Sesrovires miran gags de Peyu / @anc_ses vía Twitter