La localidad murciana de Torre-Pacheco, a unos quince quilómetros al norte de Cartagena (Región de Murcia), está siendo protagonista estos días en las redes sociales españolas por una situación que, si escalara en episodios de violencia más graves, recordaría a los pogromos de siglos pasados. Ha habido dos noches consecutivas de enfrentamientos esporádicos y mucha tensión en las calles por las cacerías antiinmigrantes de vecinos y grupos ultras llegados de fuera del pueblo, como respuesta a la agresión a un anciano por parte de al menos un joven que los sublevados identifican como de origen marroquí —si bien la policía aún no ha identificado a ningún sospechoso—.

La noche de este sábado ha habido más enfrentamientos, que han dejado varios heridos, y cargas policiales para contener la espiral de violencia en Torre-Pacheco. Algunos de los vecinos, así como grupos ultras de toda España —colectivos de extrema derecha como Desokupa—, comenzaron a organizarse en las redes sociales, para tomarse la justicia por su mano ante lo que consideran una situación de inseguridad que atribuyen a la inmigración. Así, decenas de personas se han concentrado dos noches seguidas en las calles de zonas con alta población de origen extranjero, como el barrio de San Antonio, y han protagonizado persecuciones o episodios puntuales violentos con palos, cuchillos y piedras que han obligado a la Policía Local y la Guardia Civil a intervenir para mantener el orden —si bien por el momento no ha habido detenciones—. Un policía local ha resultado herido al recibir un golpe en la boca.

El Gobierno ha desplegado un operativo policial conjunto para dar respuesta al episodio. La delegada del Gobierno en la Región de Murcia, Mariola Guevara, ha solicitado el envío de unidades antidisturbios de la Guardia Civil desde Valencia para reforzar la seguridad; a su vez, se ha convocado una reunión de urgencia de la Junta Local de Seguridad. Guevara ha afirmado en un comunicado en sus redes sociales que se están investigando los incidentes ocurridos, que se comenzaron a producir justo después de que el Ayuntamiento de Torre-Pacheco organizara una concentración pacífica para condenar la agresión al vecino de edad avanzada. La delegada del Gobierno asevera que no se tolerará "la violencia ni el odio" y ha hecho un llamamiento a la calma y a la colaboración "para proteger la convivencia".

Vox alienta la revuelta y el Gobierno denuncia "persecuciones racistas"

Desde la oposición, el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, ha pedido al Gobierno que refuerce los efectivos policiales para "frenar la espiral de violencia inmediatamente". "Lo primero es garantizar la seguridad ciudadana y que todos respondan ante la Ley, empezando por los agresores de un mayor indefenso", ha valorado Feijóo en un tuit, en el que ha anunciado que está en contacto con el presidente murciano, Fernando López Miras (PP), y el alcalde de la localidad, Pedro Ángel Roca (PP). Roca ha afirmado en declaraciones a El Mundo que los episodios de "violencia" y "vandalismo" han crecido "mucho" ultimadamente en Torre-Pacheco, "un pueblo que ha crecido mucho durante los últimos 30 años". Con todo, el alcalde popular ha aseverado que esto "jamás" puede justificar la violencia. Roca también ha celebrado que "la sangre no está llegando al río" por la "excelente" intervención de la delegación del Gobierno.

Por su parte, la ministra de Juventud e Infancia, Sira Rego, ha condenado las "persecuciones racistas" a personas inmigrantes en Torre-Pacheco. "La ultraderecha y la derecha señalan y sus escuadristas actúan", ha escrito Rego en la red social Bluesky. Por su parte, Podemos ha exigido la regularización inmediata de todas las personas inmigrantes para lograr parar la "violencia racista" tras los incidentes ocurridos en la localidad. "Hay que parar esta violencia racista y solo hay una manera de hacerlo: regularización inmediata de todas las personas que viven aquí, cortarle el grifo mediático a la ultraderecha, sus discursos no son una opinión, son odio, y servicios públicos fuertes", ha escrito la líder de Podemos, Ione Belarra, en su cuenta de X.

Vox ha encabezado este sábado en Torre-Pacheco el acto 'Defiéndete de la inseguridad', donde ha criticado la inmigración ilegal y ha alertado del aumento de la inseguridad en algunos barrios de esta localidad murciana de 40.000 habitantes. Su líder regional, José Ángel Antelo, ha comparado los niveles de inseguridad en Torre-Pacheco con áreas conflictivas en otros países europeos. Las redes sociales se han llenado de mensajes de usuarios afines a la extrema derecha instigando los disturbios con motivación racial.

Agresión a un jubilado de 68 años "por diversión"

El detonante de la oleada de episodios violentos fue la agresión sufrida el viernes por parte de un pensionista de la localidad, que se ha identificado ante los medios como Domingo Tomás, de 68 años. Cuando el jubilado salió de casa alrededor de las 5:50 h de la mañana para hacer su caminata diaria de cuatro quilómetros en dirección al cementerio local, un joven que identifica como de origen marroquí le pegó "por diversión" y sin motivo alguno, según ha denunciado la víctima, que presenta toda la cara marcada por evidentes signos de violencia. Otros dos chicos más le grababan con el móvil, según consta en su denuncia ante la Guardia Civil. "No le dije nada ninguno de ellos", ha defendido el jubilado en declaraciones a El Español. Según la víctima, en el pueblo los chicos jóvenes "están haciendo un reto que consiste en pegar a alguna persona, para ver quién pega más fuerte y creo que por eso lo hicieron". 

Tras el incidente, ha comenzado a viralizarse por redes sociales el vídeo de origen indeterminado de una paliza a un anciano, en el que aparece un hombre de aspecto similar a Domingo Tomás, y que ha motivado la movilización de grupos ultra hacia la localidad murciana. Sin embargo, el jubilado de Torre-Pacheco ha dejado claro a la Guardia Civil que él no es la persona de ese vídeo. Se trata de un bulo. El jubilado pide que se encuentre al verdadero agresor, que no es quien aparece en el vídeo viral: "Mide 1,75, tiene entre 30 y 35 años, de complexión normal y vestía una camiseta de tirantes", es la descripción del sospechoso que consta en la denuncia.