El cambio climático y los entornos cada vez más urbanizados están provocando un declive del canto de los pájaros. Estos cantan más flojo y tienen un repertorio menor. El estudio lo ha publicado la revista Nature y se basa en uno amplio análisis en 200.000 lugares de Norteamérica y Europa. Así pues, los paisajes sonoros naturales se han vuelto más homogéneos y más silenciosos. Dentro de estos patrones generales de calidad reducida del paisaje sonoro, se ha detectado una variación sustancial a nivel de lugar. Mediante la reconstrucción de paisajes sonoros a partir de conjuntos de datos de seguimiento de aves a gran escala y grabaciones archivadas de especies individuales, se pueden explorar los cambios en la calidad del paisaje sonoro durante las últimas décadas.

Los resultados revelan un deterioro crónico de la calidad del paisaje sonoro, definido como una reducción de la diversidad e intensidad acústica. También sugieren que es probable que los cambios en la composición, la diversidad y la abundancia de las comunidades de pájaros hayan contribuido a eso. Pero el declive irá a más: la disminución continua de las poblaciones de pájaros se espera que provoque más reducciones en la calidad del paisaje sonoro y, por extensión, una dilución continuada de la experiencia de contacto con la naturaleza. Para las conclusiones, se han integrado datos de monitorización de pájaros de ciencia ciudadana con grabaciones de especies individuales para revelar una pérdida generalizada de diversidad acústica e intensidad de los paisajes sonoros que ya se lleva generando desde hace 25 años.

Los paisajes sonoros naturales están bajo una presión cada vez mayor por la pérdida de biodiversidad global y ponen los pájaros como el ejemplo de un deterioro general: "Aunque aquí nos centramos en los pájaros como principales contribuyentes en los paisajes sonoros naturales, es probable que la reducción de la calidad haya estado todavía mayor, vistas las disminuciones paralelas de muchos otros grupos taxonómicos que contribuyen a los paisajes sonoros. Además, los aumentos generalizados del ruido antropogénico y otros contaminantes sensoriales también están diluyendo la experiencia de contacto con la naturaleza", detalla el estudio. A modo de ejemplo, la contaminación acústica perjudica nuestra capacidad para percibir sonidos naturales.

¿Un futuro 'silencioso'?

Este enfoque también se podría utilizar para pronosticar paisajes sonoros futuros basados en los cambios de alcance previsto de las especies en escenarios de cambio ambiental. Un cambio también puede comportar variaciones en el comportamiento de la vocalización entre grupos taxonómicos. Aunque los sentidos visuales, auditivos y olfativos son modalidades importantes que caracterizan la experiencia de contacto con la naturaleza, el sonido es una característica definitoria. Se constata una reducción de la calidad del paisaje sonoro e implican una dilución continua de la experiencia asociada a las interacciones con la naturaleza. Aunque estos cambios serán más pronunciados durante la primavera, cuando los pájaros son más activos vocalmente.

La base de datos

En total, los datos de recuento se fijan en 202.737 lugares y 620 especies en Norteamérica. Para Europa, los datos de recuento estaban disponibles para 16.524 lugares y 447 especies. Los ficheros de sonido de todas las especies detectadas en las encuestas NA-BBS y PECBMS se descargaron de Xeno Canto, una base de datos en línea de grabaciones sonoras de pájaros salvajes de todo el mundo (http://www.xeno-canto.org).

Foto de portada: un ejemplar de colimbo aguja volando en el Cap de Creus durante el último censo de aves acuáticas