Después de años en la recámara y de intentar llegar a un acuerdo con la fiscalía que evitara la imagen de Oriol Pujol y su mujer sentados en el banquillo de los acusados por la trama de asignar a dedo las estaciones de la ITV, finalmente el juez ha desestimado el acuerdo porque no incluye todos los investigados y empieza los trámites para hacer un juicio con jurado popular.

Este verano la fiscalía ofreció un pacto a Oriol Pujol: dos años y medio de pena por el hijo del expresident a cambio de salvar de prisión a su mujer, Anna Vidal, y ahorrarse además el jurado popular.

Era el último intento después de que el año pasado el Ministerio Público negociara con los Pujol esta salida del caso. El TSJC, sin embargo, ha desestimado el acuerdo porque no incluye a los seis acusados (Oriol Pujol Ferrusola, Anna Vidal Maragall, Ricard Puignou Vigo, Sergi Pastor Colldeforns,
Josep Tous Andreu y Sergi Alsina Jiménez).

En su escrito de acusación inicial, la fiscalía pide una condena de cinco años y dos meses de prisión para el exdiputado de CiU —único de los hijos del expresident Jordi Pujol que se dedicó a la política—, al cual acusa de usar su poder político para favorecer los negocios de empresarios afines a cambio de presuntas comisiones que su mujer cobraba a través de facturas falsas.

El Ministerio Público pide además tres años y cuatro meses de prisión para Anna Vidal, mujer de Oriol Pujol; seis para el empresario Sergi Alsina, íntimo amigo de Pujol; uno para el exnúmero dos de la Diputación de Barcelona, Josep Tous, y la misma pena para los empresarios Sergi Pastor y Ricard Puignou.

Ahora el caso ya está en manos de la oficina del jurado. La jueza Carmen Zabalegui ha desestimado el acuerdo y también las escuchas telefónicas que sirvieron para hacer la instrucción del caso, ante la petición de dos de los acusados, Josep Tous y Sergi Alzina.

El juicio todavía no tiene fecha, y justo ahora empiezan los trámites por los que un jurado popular juzgue uno de los casos de corrupción de Catalunya.