1.209 mujeres asesinadas por violencia de género desde que se tienen datos (2023) en España. La cifra es aterradora y todavía falta sumar a las supervivientes que no denuncian. Pero esto solo es la punta de un iceberg que esconde el machismo en todas sus caras: agresiones, misoginia, sexualización, control, humillaciones, desvalorización... Qué cantidad de trabajo nos queda por hacer. Y qué razón tiene la periodista Laura Fa cuándo dice que "a las mujeres se nos trata como un colectivo cuando no lo somos: somos el 52% de la población".

La igualdad es, sin duda, uno de los temas más candentes de cara a las elecciones generales del 23 de julio. En las últimas semanas, hemos visto cómo los pactos entre el PP y Vox amenazan la lucha contra el machismo y todas las políticas de igualdad y ponen peligro toda la red institucional contra la violencia de género que se ha creado en los últimos años. Por eso, Laura Fa alerta del empeoramiento que estamos viviendo en este sentido y destaca que es una lacra transversal que afecta a todas partes, sea en Madrid o Barcelona.

"Hace unos años teníamos muy determinado donde estaba el peligro y ahora se están disfrazando algunas actitudes que nos pueden hacer perder cuál es el objetivo en esta lucha y cuáles son verdaderamente los enemigos que no dejan que se produzca esta igualdad entre hombres y mujeres", afirma.

 

Por este motivo, la periodista exige que la igualdad se sitúe como una cuestión esencial a la próxima legislatura en las cortes españolas y pide a los diputados catalanes, sean del color que sean, que "se conviertan en un ejemplo en la condena clara de la violencia machista, en un momento donde a veces se cuestiona". "Pido una condena clarísima siempre e intentar movilizar esta lucha y abrir los ojos a quien no vea esta necesidad que tenemos las mujeres. Es igual, si son de Barcelona o no, la condena tiene que ser clara", concluye Laura Fa.

Es cierto que los últimos años, sumados a la tercera ola feminista de los 90 y a todas las anteriores, han sido un motor de cambio importante en la lucha contra el machismo, gracias también a la capacidad de difusión de las redes y a la creación de referentes. A pesar de todo, según Fa, todavía hay que crear una educación que no sea sexista, donde, por ejemplo, "las mujeres en la historia no fueran una anécdota, sino que formaran parte de la realidad de lo que fueron". "Todo es así y si no empezamos a igualarlo desde la educación, estamos totalmente perdidos", asegura.