La Cumbre por el Clima encara la próxima semana que será decisiva para sacar las primeras conclusiones. Será el momento en que los ministros de Medio Ambiente de los principales países se reunirán para poner sobre la mesa los retos más inmediatos.
Las negociaciones avanzan hacia una mayor ambición climática que dé respuesta a las quejas y peticiones que desde la calle se escuchan cada vez con más fuerza. Uno de los objetivos es la perspectiva de género. Con el cambio climático la mujer sale más perjudicada y también quieren encontrar herramientas para revertir este grave problema.
El papel de la Unión Europea será clave para convencer al resto de estados que tienen la vista puesta en el próximo 2020, cuando entrarán en vigor los Acuerdos de París. No obstante, todavía falta una regulación de los mercados y tendrá que estar terminado antes de la próxima cimera que dará el relevo en la ciudad escocesa de Glasgow.
El objetivo es evitar que la temperatura del planeta suba 1,5 grados a finales del siglo XXI. Desde la organización se subraya lo que la cienciaviene avisando y la necesidad de escuchar los más jóvenes que han salido de forma masiva a las calles pidiendo conocer la verdad para poder trabajar y resolver la emergencia climática.