Hace dos años, el Govern aprobó un Decreto Ley de aceleración del despliegue de las energías renovables que establecía las bases para impulsar la transición hacia un nuevo modelo energético más limpio, sostenible, participativo y justo. El objetivo era claro: alcanzar a una sociedad descarbonizada el año 2050.

El decreto ley ya ha empezado a tener resultados. En dos años, Catalunya ha pasado de 9 a 1.500 MW de energías renovables autorizadas y a punto para ser construidas. Pero la transición energética es mucho más que energías renovables. Hablamos de ahorro energético, de eficiencia, de electrificación, de empoderamiento de la ciudadanía y de movilidad sostenible.

A partir del decreto ley, se ha ido avanzando en este cambio de modelo energético. ¿Sin embargo, cómo estamos ahora mismo? ¿Estamos haciendo los deberes en este sentido? Para descubrirlo, hoy queremos dedicar un programa especial sobre la transición energética de nuestro país, que hay que recordar que no la hace la Generalitat, sino la ciudadanía. Por eso, ElNacional.cat ha invitado a participar en una mesa redonda para abordar el tema a Daniel Pérez, director general de L'Energètica, a Manel Rivero formador y dinamizador de comunidades energéticas, y a Carles Pazos, propietario de dos vehículos eléctricos.

 

De entrada, Pérez ha remarcado que, a escala global, hay que hacer la transición energética porque el planeta se está calentando y no se están cumpliendo los objetivos climáticos. En este sentido, afirma que Catalunya tiene que hacer su aportación en la reducción de emisiones. "Pero, además, tenemos que hacer la transición energética porque nos interesa. Y es que, hoy, las energías renovables son las más baratas", indica. "Con la transición energética, atraeremos más empresas y consumidores", asegura. Estas empresas y consumidores, comenta, vendrán a Catalunya a disfrutar de esta energía barata generada con fuentes renovables.

Daniel Perez / ELNACIONAL
 

Dicho esto, Pérez subraya que hay que aprovechar la transición energética para cambiar el modelo energético. "La opción catalana es la de aprovechar este cambio de tecnología para cambiar la estructura de propiedad que hay detrás. Y que los ciudadanos, las empresas locales, los ayuntamientos y la misma Generalitat a través de L'Energètica podamos tener también una participación activa en este nuevo modelo". Es decir, comenta Pérez, que las empresas que actualmente tienen el 90% del mercado energético fósil, no pasen a tener este 90%, pero de fuentes de energía renovables.

Rivero, experto en energía solar: "Hacen falta acuerdos con gente que quiera placas solares en su tejado"

Rivero ha explicado qué es el autoconsumo energético colectivo. "El autoconsumo colectivo puede ser un grupo de vecinos de un bloque que se ponen de acuerdo para instalar placas solares", ha señalado. Sobre este punto, comenta que una de las particularidades interesantes del autoconsumo energético colectivo es que las placas solares no hace falta que se instalen en el mismo tejado, sino que puede buscarse otra que se encuentre a una distancia máxima de dos kilómetros. "Un grupo de gente se puede poner de acuerdo para producir energía para ellos, a un precio mucho más económico que a través de la compañía eléctrica", indica Rivero. "Se puede aprovechar un tejado público o privado", añade.

Manel Rivero / ElNacional
 

También ha subrayado que también existen las comunidades energéticas. "Una comunidad energética es un autoconsumo compartido, pero con una entidad jurídica que ofrece más servicios a los usuarios", ha afirmado. Buen ejemplo de ello es, según él, la ciudad del Prat de Llobregat, que está creando una comunidad energética de ciudad. "Una comunidad energética puede ofrecer muchos más servicios. Por ejemplo, servicios de rehabilitación, aerotermias, planos de ahorro...", ha remarcado. Y ha recordado que hay que explotar más los tejados de las viviendas para producir energía solar porque "tenemos mucho tejado expuesto al sol". "Hacen falta acuerdos con gente que quiera instalar placas solares en su tejado", ha subrayado.

Carles Pazos, usuario de vehículo eléctrico: "El coste de mantener un coche eléctrico es casi anecdótico"

En primer lugar, ha señalado qué es lo que cambia de utilizar un coche eléctrico en lugar de uno fósil. "Tienes que planificar tus circuitos e intentar ser lo más eficiente energéticamente posible. Pero mi vida no ha cambiado", asegura. Y ha destacado que, afortunadamente, en Catalunya, hay una muy buena red de recarga y la ventaja que supone poder aparcar gratuitamente en las zonas azules de la ciudad de Barcelona.

Carles Pazos / El Nacional
 

En segundo lugar, con respecto al coste económico de apostar por el coche eléctrico, ha subrayado que, hoy día, hay una gran variedad de coches de diferentes gamas para escoger y que su mantenimiento es muy barato. "El coste de mantener un coche eléctrico es casi anecdótico. Puedes gastarte en torno a 100 euros el año", ha indicado. "Si haces más de 12.000 kilómetros el año, ya te sale a cuenta el vehículo eléctrico", ha afirmado. Y lo ha remachado, asegurando que "a partir del cuarto o el quinto año, ya puedes amortizar el gasto hecho". "Eso sin tener en cuenta las ayudas de la administración. Si consigues las ayudas, la cosa baja muchísimo", ha remachado.

Finalmente, con respecto al impacto ecológico del vehículo eléctrico, ha asegurado que su familia ha ahorrado 18.000 litros de combustible en 10 años. "Con mi vehículo eléctrico, he dejado de quemar 10.000 litros de combustible. Y con el otro vehículo que tengo 8.000 más, ha señalado.