¿Los hornos eléctricos son un elemento básico a muchas cocinas modernas, pero alguna vez te has preguntado cuánta energía consumen realmente y cómo puedes reducir este consumo? En este artículo exploraremos el consumo de energía de los hornos eléctricos y proporcionaremos algunos consejos útiles para ahorrar energía mientras cocinas.

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¿Cuánto consume un horno, según la OCU?

El consumo de energía de un horno eléctrico está directamente relacionado con su potencia, su modelo y momento del día que lo utilices. Algunos hornos pueden superar los 3000 W de potencia, pero es importante tener en cuenta que no utilizan esta potencia de manera constante. Cuando el horno llega a la temperatura programada, se apaga durante un tiempo, cosa que reduce el consumo real de energía.

Por ejemplo, cocinar un pollo en un horno eléctrico consume aproximadamente 1,5 kWh, cosa que equivale a unos 30 céntimos, mientras que preparar un bizcocho costaría en torno a 15 céntimos.

Calcular el gasto diario, semanal o mensual de tu horno

Para calcular el gasto aproximado de tu horno en un día o en una semana, tendrás que multiplicar su potencia en kW por las horas que lo tienes encendido al día o a la semana. Después, tendrás que multiplicar el resultado por el precio de la luz.

Por ejemplo, si tu horno tiene una potencia de 1,5 kW (1.500 W) y lo has encendido 3 horas esta semana, tu consumo habrá sido de 4,5 kW. Poniendo de ejemplo que el precio de la luz es de 0,1201 €/kWh, tu gasto semanal sería de 0,5 euros.

¿Cómo ahorrar en el consumo de energía de tu horno? 6 consejos que necesitas

  • Escoge un horno eficiente: Cuando compres un horno eléctrico, busca uno que sea de la clase de eficiencia energética más alta posible. Los hornos de bajo consumo, que llevan la etiqueta A o B, pueden consumir hasta un 60% de energía menos que los de etiqueta G.
  • Utiliza un horno de convección: Los hornos de convección son los que tienen un ventilador y, por lo tanto, son más eficientes en la distribución del calor. Eso puede reducir el tiempo de cocción y, en último término, el consumo de energía y dinero.
  • Evita abrir el horno innecesariamente: Cada vez que abras el horno, se pierde al menos el 20% de la energía acumulada en su interior. Trata de evitar abrirlo innecesariamente para mantener la temperatura constante y reducir el consumo de energía.
  • Aprovechad al máximo la capacidad del horno: Cocinad varios alimentos al mismo tiempo para aprovechar al máximo el uso del horno. Eso no solo ahorra tiempo, sino también energía.
  • Prepara cocciones largas sin precalentar el horno: Para cocciones que duren más de una hora, no hay que precalentar el horno. Además, puedes apagar el horno unos minutos antes de que se acabe la cocción, ya que el calor residual será suficiente para completar el proceso.
  • Limpia el horno regularmente: Limpiar periódicamente el techo y el suelo del horno puede aumentar su eficiencia. Un horno limpio permite una mejor circulación del aire caliente, cosa que significa que el horno no tiene que trabajar tan duro para alcanzar y mantener la temperatura deseada.