Sigue aumentando el estado de gravedad de la sequía en todo Catalunya, a pesar de las lluvias de las últimas semanas. Este martes el Govern de la Generalitat ha decidido declarar situación de alerta por sequía en una cincuentena de municipios que dependen del Consorci d'Aigües de Tarragona (CAT). Esta medida se ha tomado después de una nueva reunión de la Comissió Interdepartamental de Sequera y entrará en vigor en los próximos días, una vez se publique en el DOGC. La nueva medida adoptada implica varios cambios para hacer frente a la situación de sequía que afecta a Catalunya. Entre estos cambios se encuentra la reducción de la dotación de agua media por habitante y día, que pasará a ser de 250 litros. Eso significa que cada persona tendrá que hacer un uso más responsable del agua, haciendo un uso eficiente y evitando el despilfarro.

Además de la reducción en el consumo doméstico de agua, también se establecen limitaciones en el riego de jardines y zonas verdes. Eso quiere decir que se tendrá que reducir o incluso suspender completamente el uso de agua para regar plantas y césped en estas áreas. Además, se impone la prohibición llenar fuentes ornamentales, ya que esta práctica supone un consumo considerable de agua que no es necesario para las necesidades básicas de la población. Otra medida importante es la restricción en la limpieza de calles. Esta actividad tendrá que ser reducida al mínimo posible con el fin de reducir el consumo de agua. Es importante priorizar la limpieza en áreas críticas y asegurar que se hace un uso eficiente del agua en esta tarea esencial para mantener la salubridad de las vías públicas.

Con la implementación de estas medidas, el número de municipios catalanes en situación de alerta por sequía se incrementa en 90, mientras que hay 2 municipios en prealerta, 43 en una situación de normalidad y 495 en excepcionalidad. A pesar de algunas precipitaciones recientes, el Govern considera que el panorama de la sequía sigue siendo muy grave. Es cierto que se ha observado un ligero incremento de las reservas de agua, pero eso no es suficiente para solucionar el problema de fondo. Si no se reduce el consumo de agua de manera significativa, se prevé que la entrada en una situación de emergencia pueda producirse a finales del verano o a principios del otoño.

Impulso de nuevas desalinizadoras

El Govern también ha valorado este martes el impulso de actuaciones estructurales para incrementar la producción de agua desalinizada en los próximos años. Según han informado, la empresa pública ATL ha puesto a información pública el proyecto básico y el estudio de impacto ambiental para la construcción de la nueva planta desalinizadora del Foix en Cubelles (Garraf), que se sumaría a la de Tordera (Marisma).