El Govern declarará este martes la alerta por sequía en las cuencas Darnius-Boadella y Ter-Llobregat, según ha adelantado a Catalunya Radio la consellera de Acción Climática, Teresa Jordà. "Mañana declararemos la alerta por sequía en la cuenca Ter-Llobregat. Habrá 26 comarcas en alerta, 6,7 millones de habitantes", ha explicado Jordán. Anteriormente, ya había comarcas afectadas por restricciones a causa de la sequía.

Las afectaciones se concentrarán en los usos agrícolas, ganaderos, industriales y recreativos. A pesar de todo, la consellera ha dado un mensaje tranquilizador afirmando que la alerta por sequía no afectará al agua de boca. "La ciudadanía no notará la alerta. No habrá cortes|trozos de agua. Pero la industria, por ejemplo, tendrá una reducción del 5% en el uso del agua". La declaración de alerta implica la reducción del uso del agua para riego agrícola (25%), para usos ganaderos (10%), para los industriales (5%), para usos recreativos que impliquen riego (30%) y para otros usos recreativos (5%). Con respecto a los usos urbanos, se limitará el riego diario de jardines y zonas verdes así como llenar fuentes ornamentales o limitar como se llenan las piscinas y el agua que se utiliza para limpiar las calles. También se establece una dotación máxima de 250 litros por habitante y día.

Jordà apuntó que se prevé que este invierno llueva más de lo habitual, pero advirtió de que, aunque acabara pasando, las eventuales precipitaciones no "salvarían de la sequía". Por eso, ha apelado a la responsabilidad de los ciudadanos, que este verano han aumentado 11 litros de agua el consumo diario. En promedio, cada persona utiliza 130 litros de agua al día en Catalunya. La consellera ha recordado que los distintos Ejecutivos catalanes "han hecho los deberes" en gestión de agua y ha destacado que las reservas de agua hoy rondan el 34%.

Medidas de gestión de la sequía

Ante esta alerta, el Gobierno tiene recogido varios pasos a seguir en esta situación. Recogidos a su web podemos encontrar que bajo esta alerta se reducen las extracciones de agua de los embalses y la producción de agua desalinizada se incrementa progresivamente del 50-75%. Además, incrementa el régimen de extracciones de agua de los acuíferos y pozos recuperados. Se anularán los desembalses para uso exclusivamente hidroeléctrico y se intensificarán los controles de usuarios y el refuerzo de las medidas de ahorro en las redes de abastecimiento.

En cualquier caso, todas estas medidas mencionadas no se pondrán en práctica hasta que se confirme a través de una publicación en el DOGC la declaración de la alerta de sequía en las nuevas comarcas.