La aparición de grandes cantidades de pequeñas bolas de plástico blancas, pellets, en varias playas gallegas de la comarca de Barbanza (noroeste de España) ha encendido las alarmas a entidades ecologistas, que han pedido a las autoridades actuar de manera inmediata para evitar un desastre medioambiental. Todo apunta que estos microplásticos han llegado procedentes de un barco que navegaba por aguas portuguesas y perdió contenedores. De momento, la presencia de estos plásticos se ha extendido ya hasta zonas de la costa de Oleiros y Outes, y de la Mariña de Lugo, según han notificado los ayuntamientos de la zona. Por su parte, la Xunta de Galicia ha pedido "calma" y ha reclamado más información sobre la situación al Gobierno.

La asociación medioambiental Noia Limpa ha denunciado que desde el pasado 13 de diciembre han empezado a aparecer pellets de plástico en bolsas de unos 15 kilogramos, dispersos en la comarca de Rías Baixas, especialmente en la ría de Muros y Noia. La entidad señala que estos sacos están rotulados con el nombre de la empresa Bedeko Europe, por lo que este material podría provenir de un barco de carga que a inicios de diciembre transportaba este material.


El consejero do Mar, Alfonso Villares, ha sido quien ha pedido "calma" ante el vertido de estas pequeñas bolas de plástico, en declaraciones a los medios junto con la vicepresidenta segunda y consejera de Medio Ambiente, Territorio y Vivienda gallega, Ángeles Vázquez, antes de presidir la comisión técnica de seguimiento de la situación de los arenales gallegos. Villares ha cargado contra el Gobierno, lamentando que tienen que valorar datos que no tienen, ya que, según ha denunciado, el ejecutivo de Pedro Sánchez no les ha facilitado más información.

En este sentido, ha asegurado que la única comunicación que ha recibido la Xunta tuvo lugar los días 3 y 4 de enero, a través de unos correos electrónicos en que se informaba de que un barco en las aguas Portugal había perdido "unos contenedores". Por eso, ha insistido en que quieren recopilar toda la información que puede haber "mínimo desde el 20 de diciembre" para "tranquilizar a la sociedad". "Si es un contenedor, creo que la gente también dimensiona el problema; y si es un contenedor, quizás ni todos los sacos de pellets están derramados", ha señalado.

Por su parte, la vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica y Reto Demográfico, Teresa Ribera, ha afirmado que sigue pendiente de la evolución de la situación de la costa gallega y ha ofrecido a la Xunta "la colaboración y ayuda que consideren necesaria". Asimismo, ha agradecido a la delegación del Gobierno "el seguimiento de todos estos días sobre terreno".