El presidente de la Federación Española de Asociaciones de Agencias de Viajes (FEAAV), Rafael Gallego, reconoce que el sector vive con "mucha preocupación" la imagen que trasladan al exterior los episodios de turismofobia y advierte que existe el peligro de que haya un incidente grave con "violencia real".

"La turismofobia nos preocupa desde el verano pasado, momento en el cual empezó a forjarse la problemática, cuando el vicepresidente y consejero de Turismo de las Baleares, Biel Barceló, hizo declaraciones sobre este asunto y la FEAAV lo advirtió del peligro de sus manifestaciones", ha dicho el líder de la Federación.

Gallego ha apuntado que, aunque durante 2016 sólo hubo algunas pintadas, ya advirtió de lo que podía suceder si los dirigentes políticos seguían hablando en esta línea, "y eso ya ha pasado en Barcelona con la permisividad y las declaraciones de representantes".

"Allí, en el 2016, se registraron pintadas y hubo una agresión con vasos de cristal a unos turistas que estaban de excursión, por eso alertamos de que esta situación se podía radicalizar, como ya se ha podido ver", ha añadido.

"Más fascistas que la ultraderecha"

La FEAAV está "muy preocupada", "más que por lo que pueda afectar a la imagen de la marca España", porque unos grupos "que por más que se pinten de izquierdas son más fascistas que la propia ultraderecha, pueden provocar cualquier día un incidente grave con los que nos visitan".

"El crecimiento del número de turistas es una situación coyuntural por los problemas de inseguridad que sufrieron los destinos de sol y playa competidores con España, pero que, los próximos años, veremos cómo ya no habrá estas cifras de aumento porque se están recuperando Túnez y Egipto, aunque todavía de forma lenta", ha especificado.

Rafael Gallego también ha apostillado que la situación que se vive al país con el turismo urbano en los dos últimos años viene dada por los actos terroristas vividos en varias ciudades europeas, cosa que ha provocado que el propio español se quede en España en vez de viajar a Francia, Alemania o Bélgica, y eso, según su opinión, "también es coyuntural".

"No sobra ni un solo turista"

"Para mí tiene que haber más declaraciones como la de Ximo Puig, presidente de la Comunidad Autónoma de Valencia, quien ha defendido que aquí no sobra ni un solo turista. Creo que esta es la actitud", ha añadido.

Gallego también ha puesto en valor aquello que el turismo aporta a la economía del país: "Es el sector que han recuperado más puestos de trabajo después de la crisis, con lugares como Canarias, Baleares, Costa del Sol o Catalunya, donde tiene una gran incidencia tanto en el Producto Interior Bruto como en la ocupación". Según su opinión, las autoridades políticas tienen que "eliminar" de sus discursos cualquier indicio de permisividad hacia la turismofobia.

"A Colau parece que le hace gracia"

"No hay que adoptar la postura de la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, quien parece que esta situación le hace incluso gracia y sólo le resta importancia. La turismofobia empezó en el 2016 con pintaditas y ya se hacen manifestaciones entrando en hoteles, restaurantes y puertos deportivos. El peligro es que mañana se pueden vivir una situación de violencia real y veremos quién se hace responsable", ha incidido el presidente de la FEAAV.

Gallego ha reconocido que el país sigue viviendo una creciente llegada de visitantes por la coyuntura que sufren los destinos competidores, aunque ha asegurado que la cifra de 84 millones de turistas la puede soportar España porque "hay camas para eso".