El Ministerio del Interior no se plantea en este momento el pago de una gratificación extraordinaria a policías nacionales y guardias civiles por el trabajo que están realizando en la crisis del coronavirus y el riesgo de contagio al que se están enfrentando, según informa El Independiente.

A principios de la pasada semana, la Confederación Española de Policía (CEP) pidió por carta al ministro Grande-Marlaska que avalara "con hechos" el reconocimiento al servicio que están prestando los funcionarios del Cuerpo en primera línea desde que se declaró el estado de alarma y acordara una productividad de hasta 1.000 euros netos, como estudia hacer el Gobierno francés.

Ahora, Aprogc ha sido la primera asociación profesional de la Guardia Civil que reclama a Interior una "compensación" económica, no sólo por la labor que los agentes que están realizando a fin de velar por el cumplimiento de las medidas restrictivas de movimientos de personas y vehículos establecidas en el decreto que regula al estado de alarma sino también por las limitaciones que se les han impuesto mientras dure esta situación excepcional.

La petición de Aprogc se produce tras trascender que la Generalitat de Cataluña está barajando conceder una paga de 666 euros a todos los empleados públicos -como sanitarios, bomberos y trabajadores de cuerpos de emergencias- que están desempeñando labores en la gestión de la crisis derivada de la covid-19.

"Estamos cumpliendo. Excepcionalmente asumimos limitaciones por el bien de todos, pero no renunciamos a lo que nos corresponde. Hemos sido muy castigados por la covid-19. Esperemos no serlo por quien nos gobierna: tercer tramo y compensación por estado de alarma", ha lanzado Aprogc en un tuit, en el que desmienten al ministro del Interior: los guardias civiles no han renunciado a sus permisos, se ha "impuesto" su revocación debido a la pandemia.