En Catalunya faltan médicos y no es cierto que se marchen especialistas. Esta es la visión del presidente del Colegio de Médicos de Barcelona, Jaume Padrós. Sin embargo, ¿cómo se puede solucionar este problema? Él cree que se tendrían que abrir más plazas a las facultades e incluso deja caer otra posibilidad. Todavía todo cogido con pinzas, por eso. Padrós critica la capacidad de formar nuevos médicos y constata que el problema que ha dicho durante mucho tiempo se está convirtiendo en una realidad. "Tenemos un sistema sanitario al que le falta músculo". Recibe a ElNacional.cat a su consulta para abordar diferentes temas y hablar de la situación actual del sistema sanitario.

Hace días que la pandemia no llena ni titulares ni páginas de diario. ¿Se ha acabado?

La pandemia no se ha acabado y eso se tiene que decir. Cuántos más días pasan se irá confirmando que eso acabe teniendo un comportamiento más débil o estacional que hará falta focalizar la protección a los más vulnerables. Ahora pero tenemos una cierta visión de lo que nos ha pasado estos años. Justo esta semana hemos hecho el acto Inolvidables, acto en el Colegio (de Médicos de Barcelona) porque han sido meses de una gran intensidad, sobre todo la primera ola, para la población, la gente que murió, los del covid persistente y la profesión. Un acto de reconocimiento para la profesión. Estamos como el resto de la población, tenemos un agotamiento pandémico, nosotros hemos vivido más frustraciones que la población porque nos hemos enfrentado cada día. También hemos empatizado durante todo este tiempo con sectores especiales, los que no podían abrir. Ahora bien, nuestro ADN no es gremial, no defendíamos intereses sino un escudo protector. Atender el mes necesidades, sobre todo en la primaria, había y hay muchas patologías que quedaron desatendidas porque estábamos atendiendo otra situación que pasaba por encima. El balance de todo eso necesitaremos tiempo para hacerlo.

A pesar de todo, el sistema sanitario ha aguantado...

Tenemos una sociedad de la que nos tenemos que sentir orgullosos cuando se organiza y cuando actúa. Somos el servicio público mejor valorado por los ciudadanos, incluso en los momentos que ha habido más grieta, con la cuarta y quinta ola. Sin embargo, se tiene que decir, tenemos un sistema sanitario que le falta músculo. Hemos aguantado porque los profesionales lo han dado todo. Antes ya había denunciado, como presidente del Colegio, que nos habíamos quedado con el sonsonete del mejor sistema sanitario del mundo. Y claro cuando piensas en 200 países, seguro de que estamos entre los mejores, pero nuestro sistema sanitario era mucho más fuerte y robusto años atrás. Estaba pensado por un país y para una sociedad de finales del siglo XX y ahora tenemos una sociodemografía diferente con abordaje diferente, que necesita un abordaje diferente. Los recursos son limitados, veremos cómo impacta la guerra de Ucrania a los recursos. Una de las lecciones es que los países son fuertes si tienen sistema sanitario fuerte. La recuperación del país cuelga de tres grandes pilares, economía productiva, políticos que se preocupen de tener economía productiva, facilitar vida, economía y empresarial, que genera riqueza y recursos para el sistema sanitario. Sin economía no tenemos salud, pero tampoco tenemos salud sin economía. El otro pilar es el marco referencial de valores y ética de una sociedad. Una sociedad que prioriza los vulnerables. Lo que quiero decir es que lo que necesitamos ahora es un sistema sanitario fuerte, que tiene que cambiar con algunas cosas. Un sistema sanitario fuerte quiere decir, por ejemplo, que hace investigación y docencia.

Tenemos un sistema sanitario que le falta músculo

¿Hacia dónde tendríamos que mirar?

A la Primaria hay mucha burocracia que alguna es importante sin embargo, por ejemplo, hay más un millón y medio de bajas cortas. Los países más adelantados hacen para las bajas una declaración autoresponsable. Se les tiene que hacer (a los ciudadanos) copartícipes del sistema sanitario. Se tiene que hacer un buen uso de los servicios públicos y no perder el tiempo con burocracias absurdas o fajas jurídicas. Necesitamos más flexibilidad. Eso lo vemos con la primera ola que se sacan muchas de las normas. Es un país donde sobra mucha normativa. Por ejemplo, el marco jurídico del Hospital Vall de Hebron es lo mismo que el de las multas de Barcelona. Necesitamos un sistema diferente, la Atención Primaria tiene que cambiar pero el sistema organizativo los capa. No les permite hacer cosas que podrían hacer. Podrían compartir funciones y conducir la salud de los ciudadanos.

¿Y el ámbito privado?

Tenemos un ámbito privado que cuando ha habido la covid colabora. Mucho del sector privado tiene la base mutualística. Las mutuas nacen también de un espíritu mucho de servicio público, de los valores que impregnan el sistema público. Hay que decir que el 35% de la población, aparte de financiar el sistema público, ha optado por contratar un seguro privado.

La pandemia ha puesto de manifiesto algunas carencias del sistema sanitario. Se habían prometido cambios. ¿Se han empezado a ver?

Todavía hay demasiada timidez política para abordar cambios. Cambios quiere decir que todo el mundo se tiene que mover. Tenemos que ir a un sistema que aproveche todos los recursos disponibles. Tenemos que consolidar sistemas políticos. El ciudadano tiene derecho a saber como se aprovechan sus impuestos para tener servicio público y evaluar los resultados. Tenemos sistemas de avaluación que muestra que hay formas de gestión mucho más participativas y mes ágiles que dan mejores resultados en términos de salud o económicos. No se trata de gastar menos se trata d gastar bien. Los grandes olvidados de los últimos años por parte de las administraciones y políticos han sido los profesionales de la salud. Tenemos profesionales buenos pero maltratados. No sólo de salario sino de condiciones de ejercicio. Hemos tendido a uniformizar por debajo los liderazgos. Esta manera de funcionar lo que está haciendo es desincentivar los liderazgos.

¿Podría cambiar alguna cosa la partida de salud en los presupuestos aprobados este año?

Esta es la prueba de fuego. El gobierno de la Generalitat lo té presente pero el gobierno del estado no lo tiene en cuenta y ha suspendido los fondos covid. ¿Cómo se puede suprimir si no se ha acabado la pandemia? Cuando eso ha servido para contratar a muchos profesionales, unos profesionales que se tienen que quedar a estos profesionales. Tenemos todos los temas de salud mental, que era un ámbito que había quedado olvidado, gestores covid, que hacen trabajo en el ámbito administrativo y apoyo del médico y que lo libera de carga. El Govern de la Generalitat lo contempla pero claro el presupuesto no. Los presupuestos del estado mandan. Necesitamos que los partidos entiendan que no podemos no tener fondos covid. En algunas comunidades se han tenido que despedir trabajadores. El sistema sanitario descansa sobre la confianza de los ciudadanos.

¿Y qué lo hace que hayan aumentado la contratación de pólizas privadas?

La contratación de pólizas privadas ha aumentado. ¿Por qué se da? El sistema público iba muy saturado y algunos, para algunas cosas han decidido contratar una póliza. Cuidado con salir del fuego para caer a las brasas... Pido a la Generealitat que ponga orden, con criterios de seguridad pública no es lo mismo contratar una póliza que otra. He visto pólizas de 12 o 14 euros en el mes. Por este precio no se puede tener nada de calidad. Hay gente que lo debe pensar pero eso són escurriduras. No todo responde a los mismos principios. Algunas sueño mutualidades y otros son iniciativas empresariales que buscan beneficios. Tiene que haber un criterio de salud publica. Se tiene que saber qué contratas porque sino es un engaño. Eso puede incomodar a alguien pero tengo la obligación de decirlo. A mí que la gente contrate póliza privada me parece muy bien. La colaboración entre publica y privada en Catalunya siempre ha estado muy positiva pero alerta porque si eso va por ganancias o simplemente a repartir dividendos de los profesionales del sector y poner en riesgo los servicios. El Departament de Salut podría regular. Los gobiernos pueden poner orden. El Departament tiene que poner unos mínimos y lo pido.

La contratación de pólizas privadas ha aumentado

¿Y con el conseller Argimon, es fluida la relación?

Ya lo era antes. Tenemos una buena relación personal pero tenemos claro uno y el otro lo que representamos. El Colegio de Médicos no es un sindicato ni una patronal es la representación de la profesión medica. Estamos para ayudar al Govern a tomar buenas decisiones. Somos un lobby positivo e intentamos influir y que se tomen buenas decisiones. Siempre pensando en el interés del propio sistema sanitario. Hemos tenido siempre una visión muy del servicio del país e independencia del sector político y hacer escuchar la voz desde la lealtad institucional y algunas criticas. Me gustaría que me hicieran más caso, pero mi obligación como presidente es tener estos canales de diálogo. También con el estado, y tengo que decir que mucho mes con Illa que con la actual, supongo que tiene que ver con talantes y nosotros es lo que tenemos que hacer. Tenemos una tendencia en general más los países latinos que los nórdicos a pensar en no empatizar o no hacernos cargo de la complejidad de tomar decisiones. El conseller Argimon es un hombre permeable y las criticas que le tengo que hacer ya se las hago y si le tengo que hacer alguna es que le pido más determinación y valentía para tomar decisiones en qué estamos de acuerdo. Realmente es más complejo. Cuando se tienen que cambiar las cosas, no sólo se tienen que cambiar las cosas también los políticos, gestores y organizaciones y también tenemos que cambiar nosotros.

¿Faltan médicos?

Uno de los problemas clave y de los más difíciles del sistema sanitario es la falta de médicos y enfermeras. Ni en Catalunya ni en el estado español ha habido evaluación de necesidades de recursos humanos bien hecha nunca. Llevamos muchos años advirtiendo a las administraciones el que esta pasando ahora. Que se están jubilando muchos médicos. Casi la mitad de las nuevas colegiaciones son extranjeros extracomunitarios de 1.900 médicos colegiados el año pasado, el 48% eran extracomunitarios. Eso también cuestiona el acceso a las facultades. Quizás nos equivoquemos pidiendo notas inflacionadas. Para ser médico no hay que tener un expediente como si fueras a hacer física nuclear. Hay un embudo en las entradas de las facultades. Necesitamos fabricar más médicos y eso no es una decisión de un día para otro. Tenemos un sistema de cartón piedra en España para formar médicos.

Para ser médico no hay que tener un expediente como si fueras a hacer física nuclear

¿Vienen muchos médicos de fuera?

Hay una tendencia al aumento de personas que provienen de fuera, que vengan de donde sea mientras sean buenos pero no sabemos si son buenos. Eso es un problema y otro que es el lingüístico. Se incorporan pero no tienen conocimiento de la lengua catalana. Solo un tercio de los que se colegian son de origen catalán. Es una anomalía. Sobre todo habiendo tantas demandas para estudiar medicina. Necesitamos buenos profesionales y no es verdad que los médicos se marchen fuera. El año pasado, de 36.000 colegiados, se marcharon 170 y 103 eran extracomunitarios. Por lo tanto no podemos decir que se marchan. Se van a hacer fellows. Algunos tienen doble nacionalidad o vuelven al país de origen o lo utilizan como palanca para ir a la UE.

¿Dice que faltan médicos, hay cifra?

Faltan especialidades determinadas. Radiología, anestesia, pediatría, que es un caso aparte, urgencias...

Hablaba ahora también de un posible embudo a las facultades. ¿Cómo se soluciona?

Se tienen que abrir más plazas a las facultades. Hay un debate que en Madrid optaron por tener muchas facultades privadas, aquí hay dos la UIC y UVic, y parece que hay alguien que está proponiendo hacer una tercera. La necesidad está. Necesitamos replantear la entrada y el tipo de médico. Médicos buenos académicamente pero también tienen que ser brillantes con habilidades comunicativas y empatía. Hemos convertido el sistema de entrada en una carrera competitiva.

¿Puede dar más detalles sobre esta "tercera" que dice? ¿Estamos hablando de un nuevo grado en una universidad privada?

Sé que hay pasos, pero me pidieron que fuera reservado. La Pompeu, por otra parte, tiene rama de estudios de salud pero no tiene facultad. Es un tema que esta sobre la mesa. Más plazas tampoco quiere decir crear más facultades es ampliar la oferta.

 

Imagen principal: el presidente del Colegio de Médicos de Barcelona, Jaume Padrós / Marc Ortin