El gobierno francés ha retirado este miércoles la obligación de llevar mascarilla en la calle, que a partir de ahora sólo será una opción voluntaria. El ejecutivo francés ha tomado esta decisión aunque tiene peores datos que España. En Francia se han registrado por término medio semanal 322.256 casos de coronavirus, ante los 40.133 del estado español. Además de la mascarilla, el gobierno también ha retirado la obligación del teletrabajo, que a partir de ahora sólo será una recomendación, y permitirá quedarse de pie en estadios y acontecimientos culturales. Dentro de dos semanas, el 16 de febrero, las discotecas, que están cerradas desde el 10 de diciembre, podrán reabrir y se volverán a autorizar los conciertos de pie. En los bares volverá a ser posible consumir en el mostrador, y también se podrá consumir comida en estadios, cines y en los transportes públicos. Según el gobierno francés, a ojos de las autoridades, la amenaza de que representa la variante ómicron es ahora limitada porque es menos peligrosa que la delta, aunque resulta mucho más contagiosa.

El precedente de Dinamarca

 

Dinamarca se convirtió el martes en el primer país de la Unión Europea en levantar todas las restricciones de la covid a pesar del número récord de casos. El país confía en su alta tasa de vacunación para hacer frente a la variante de la covid ómicron. El primer intento de levantar todas las restricciones fue entre septiembre y noviembre, pero fracasó, y ahora definitivamente se ha propuesto levantar todas las medidas vigentes: mascarilla, pasaportes covid y limitación horaria de bares y restaurantes, según informa la agencia de noticias AFP. El ocio nocturno también reabrió el martes y también cayeron las limitaciones de reuniones en interiores. Sólo quedan algunas restricciones vigentes y son fundamentalmente por los viajeros no vacunados que vienen de países que no pertenecen al espacio Schengen.

Más del 60% de los daneses han recibido una tercera dosis de la vacuna un mes antes de lo previsto por las autoridades sanitarias. Junto con los que han pasado la covid de manera reciente, las autoridades sanitarias del país calculan que el 80% de la población está protegida contra formas graves de la enfermedad. "Tenemos una cobertura extremadamente alta de adultos vacunados con tres dosis", ha destacado a la epidemióloga Lone Simonsen, de la Universidad de Roskilde. "Ómicron no es una enfermedad grave para los vacunados, creemos que es razonable levantar las restricciones", ha remarcado. Por su parte, el Ministerio de Sanidad español informó el martes de un nuevo récord: el país llegó a superar los 10 millones de contagios desde el inicio de la pandemia (10.039.126). Justamente fue el 31 de enero de 2020 cuando se informó del primer caso en el Estado. A pesar de esta voluminosa cifra, los datos afianzan que la sexta ola va a la baja: en las últimas 24 horas, se han notificado 77.873 nuevas infecciones, una cifra que equivale a los niveles de las semanas de Navidad.