Hace justo dos años se detectaba el primer caso de covid en Catalunya. A finales del 2019, China detectó los primeros casos de coronavirus, y en aquel momento se hacía difícil pensar en una situación como la que finalmente se ha acabado produciendo. Dos años después, con más de 2.391.092 casos confirmados y seis olas, ¿se puede empezar a hablar del fin de la pandemia? ¿Y de la gripalización? Los expertos coinciden en que tal vez este sea el destino final del SARS-CoV-2, pero también constatan que podría estar demasiado pronto para hablar en estos términos.

"No podemos decir que la pandemia se ha acabado. No se puede decir hasta que no se sepa que es cierta. El virus está y estará con nosotros. Y lo que no sabemos es como evolucionará. No sabemos cómo pasará. Nuestro horizonte será el verano. Estamos en un periodo de máxima incertidumbre, el más inmediato será un verano bastante tranquilo respecto de la covid. No sabemos que pasará en otoño o invierno del año que viene. El virus sigue evolucionando. No se ha acabado", explica en conversación con ElNacional.cat el físico e investigador de la Universidad Rovira i Virgili (URV) Àlex Arenas. Y es que según él, podría pasar de todo, incluso la aparición de una nueva variante más transmisible y más contagiosa. "Es un proceso estocástico. Puede pasar todo. Puede ser transmisible y virulenta, pero no hay un patrón. Ahora nadie puede decir que este virus sólo puede ir a más leve. No se puede decir eso. No podemos decir tampoco que se quedará tal cual. No hay ninguna conclusión científica robusta que pueda indicar que solo puede ir a menos. Puede llevar cualquier fluctuación en cualquier sentido. Todos los caminos pueden ser posibles con la misma probabilidad. No sabemos nada", subraya y resalta.

"Estamos en un periodo de incertidumbre", añade el médico, investigador de la Universidad de Leicester y profesor de la UOC Salvador Macip, también en conversación con este diario. "Una cosa es lo que nos gustaría y la otra lo que es. El virus puede seguir tres caminos, puede ir apagándose lentamente y dar resfriados, una gripalizació que puede causar cierta mortalidad o complicarse todavía más y aparecer nuevas variantes más agresivas". Y según parece, "no podemos descartar ninguno". Lo que parece más probable es que vamos hacia la segunda. Aunque una cosa es eso y la otra, anunciar el fin de la pandemia". Así, pone énfasis en el hecho de que "las vacunas están ayudando muchísimo" y que hay que ir viendo paso a paso. "Cualquier experto con quien hables te dirá eso: tenemos que ser prudentes, pero no podemos ser triunfalistas".

¿Podemos hablar de gripalización?

Precisamente por este motivo, Arenas cree que hablar de gripalización "es un error garrafal". "Es una barbaridad hablar de una gripe. Han querido coger una palabra para hacer que la gente esté menos asustada, pero estamos muy lejos de gripalizar este virus, es una manera de hablar nefasta. Tenemos que hablar con prudencia. No es ni será una gripe nunca. Solo con la transmisibilidad (porque una persona puede padecerlo como una gripe) no hay ninguna gripe que nos haya puesto contra las cuerdas de la manera que hemos sido. Con restricciones fuertes. Ni se puede ni beneficia a nadie (hablar de gripalización)", insiste.

Sin embargo, el investigador expone que con ómicron, mucha gente ha pasado la enfermedad como una gripe. De esta manera, "tantas personas infectadas llevan un porcentaje pequeño que en números absolutos es muy grande, pone el sistema contra las cuerdas y al límite". "La covid ataca mucho a grupos vulnerables, personas mayores, gente con patologías o factores de riesgo. Mi idea sería ir a estos grupos diana, sería con estos grupos que habría que hacer acciones de prevención". En este sentido, el experto insiste: "Optimismo todo, prudencia máxima. Eso hará desaparecer del día a día la covid, que abra las noticias. Ahora es cuando hay que bajar, tenemos un tiempo, preparémonos para lo que sea. Establecer sistemas de prevención de detección más firmes para el país".

Macip también cree que con la idea de la 'gripalizació' se está transmitiendo "el fin de la pandemia". "No tenemos ninguna garantía que eso funcione bien. Estamos haciendo experimentos, Dinamarca, Reino Unido... cuando menos, las cifras del experimento inglés demuestran que, si no controlas la pandemia, tienes más mortalidad". Así, destaca que eso va más de "qué cifra cada país está dispuesta a tolerar. Entran factores sociales y económicos en juego. Estos países aceptarán más mortalidad que otros que puedan tener más margen. La decisión de que es final de la pandemia no es epidemiológica, es política y social. Probar a ver qué pasa si no hacemos nada".

A estas alturas, todavía es demasiado pronto para ver qué pasará con la reducción de las medidas contra la covid. El futuro es incierto y habrá que ver cómo evoluciona la pandemia y de qué manera lo hace. No hay certezas absolutas, solo previsiones.

 

Imagen principal: un niño lee un libro con una mascarilla puesta / Unsplash