El presidente en el exilio, Carles Puigdemont, ha participado activamente en la nueva sesión de la comisión de investigación sobre Pegasus en el Parlamento Europeo. Puigdemont ha dirigido dos paquetes de preguntas al jefe de seguridad del laboratorio de Amnistía Internacional, Claudio Guarnieri, y a la abogada y activista de los derechos humanos Miriam Saage-Maass. A Guarnieri le ha preguntado sobre la seguridad de las empresas con respecto a la intrusión del spyware Pegasus, y si hay ninguna manera de limar los errores para detectar la entrada de programas informáticos maliciosos: "Ve alguna manera de controlar, de forma efectiva, con garantías, el uso de una tecnología que puede ser indetectable?". Acto seguido, a Saage-Maass le ha preguntado, a propósito del masivo ciberataque que sufrieron diferentes líderes políticos, si ha habido alguna repercusión en la Unión Europea por lo que respecta a los derechos humanos. Lo ha hecho con un paquete de tres cuestiones: "¿Según las evidencias recogidas hasta ahora, cree que la situación en la UE con respecto a los derechos humanos ha mejorado? ¿Están más garantizados antes del uso de los programas de espionaje informático? Es más fuerte la UE, desde el punto de vista de los derechos humanos?".

A la primera pregunta, Guarnieri ha argumentado que es muy difícil elaborar mecanismos para evitar la intromisión de un software espía que, precisamente, está creado para no ser detectado. De esta manera, el especialista en ciberseguridad ha asegurado que los mismos spywares se van mejorando y evolucionando según las barreras que se les ponga fachada, para así poder sortearlas y poder infectar sin ser detectados. "Ojalá se pueda mejorar en este sentido", ha sentenciado. Saage-Maas ha afirmado que los derechos humanos todavía no se han blindado lo suficiente ante los ciberataques a la intimidad y a la información privada. "El Parlamento Europeo tiene que mirárselo en profundidad", ha afirmado.

Europol se lava las manos

La Europol desconocía que el software de espionaje Pegasus se estaba utilizando en la Unión Europea (UE) y lo supo gracias a las revelaciones de CitizenLab, que también hicieron público el escándalo del CatalanGate en el mes de abril. Así lo ha asegurado el subdirector ejecutivo de la Europol, Jean-Philippe Lecouffe, en su intervención en el comité de la Eurocámara que investiga el uso de Pegasus en la UE. Lecouffe ha confirmado que por ahora no han pedido a ningún país que investigue el espionaje con el software desarrollado por NSO, aunque el nuevo reglamento da a la agencia la iniciativa para pedir investigaciones a los estados, que después son los que tienen que decidir si las hacen o no. Según el director ejecutivo de la Europol, todavía están "evaluando" si pedir investigaciones a los estados donde se ha espiado con Pegasus.

Ante las críticas de los eurodiputados, que han acusado a la Europol de inacción ante el espionaje con Pegasus, Lecouffe ha remarcado que no descartan pedir investigaciones a los estados y que todavía lo están "evaluando". ¿"Cuánto de tiempo esperaremos? No lo sé, tenemos que evaluar la situación y ver qué hacemos", ha añadido. En caso de que sean los estados los que reclamen ayuda a la Europol en una investigación, su director ejecutivo ha dicho que lo ofrecerán. Ahora bien, ha apuntado que hoy por hoy ningún estado se lo ha pedido