El Parlament aceptará la presencia de lazos amarillos en los escaños de los diputados, pero no en la bancada del Govern. Esta es la propuesta que el presidente de la Cámara, Roger Torrent, ha planteado a los grupos para evitar nuevos episodios de tensión en el hemiciclo como el que se vivió en el último pleno. Ciudadanos protestó al empezar aquella sesión porque JxCat había colocado un lazo amarillo en uno de los dos escaños situados en el espacio central de la bancada del Govern —el otro lo ocupaba el president, Quim Torra—. El lazo estaba justo ante el escaño de la líder de Cs, Inés Arrimadas, y las protestas del portavoz naranja, Carlos Carrizosa, que sacó el lazo y se negó a devolverlo, obligaron a suspender la sesión hasta solucionar el conflicto.

Todas las formaciones de la Cámara catalana han aceptado la fórmula planteada por Torrent como una manera de preservar los derechos de los grupos, que son los que tienen asignados los correspondientes escaños. Sin embargo, durante la reunión, la representante de JxCat, Gemma Geis, ha expresado su discrepancia con esta solución por considerar que el Govern también debería tener libertat para poner los lazos en sus escaños. De hecho, el portavoz del grup, Albert Batet, ha publicado un tuit negando que aceptara esta propuesta.

La bancada del Govern es la primera del hemiciclo. Lo mismo que ocurre en el Congreso de los diputados donde los ministros se sientan en la primera fila. Precisamente la vicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría colocó su bolso en el escaño del presidente, en la bancada del ejecutivo, durante el debate de la moción de censura, lo cual provocó todo tipo de comentarios, incluido el del líder de Podemos, Pablo Iglesias, pero no por la presencia del bolso sino por la ausencia de Mariano Rajoy.

En el caso del Parlament, a partir de ahora en aquel espacio no podrá haber lazos amarillos ni ningún otro símbolo. Esta es la propuesta del presidente del Parlament para evitar más episodios de tensión. Lo que sí se podrá es poner símbolos en los escaños que pertenecen a los diputados, "siempre y cuando sean respetuosos con los principios democráticos". De hecho, desde que se constituyó el Parlament después de las elecciones ha habido lazos en los escaños de los diputados encarcelados o exiliados, y no había provocado ninguna protesta del resto de grupos. El problema surgió cuando apareció un lazo en los escaños del Govern.

La propuesta de Torra tendrá que ser ratificada este martes en la Junta de Portavoces.