El president del Parlament, Roger Torrent, ha anunciado este viernes que no se ha presentado ningún candidato o candidata a la presidencia de la Generalitat después de cerrar la ronda de consultas con los grupos parlamentarios. Por lo tanto, una vez hecho este trámite, Torrent activará la cuenta atrás para las elecciones catalanas del próximo 14 de febrero.

El president comunicará esta decisión en el plenario del miércoles a todos los diputados y a partir de aquí se abrirá el periodo de dos meses previos a los comicios. Si en este tiempo no hay ningún debate de investidura, como es previsible, la cámara se disolverá de manera automática el 21 de diciembre y se convocarán elecciones para febrero.

La comunicación que hará el republicano en el hemiciclo equivaldrá a una investidura fallida y aquel mismo día se publicará una resolución en el Butlletí Oficial del Parlament (BOPC). Una vez acaben los 60 días de margen, si no hay presidenciable, el Govern publicará el decreto de convocatoria de comicios.

Elecciones y Covid

Por otro lado, sobre las posibilidades de celebrar elecciones el 14 de febrero en una situación de pandemia, el president de la cámara ha tirado pelotas fuera y ha dicho que esta cuestión corresponde al Govern y no al Parlament. "Corresponde al Govern valorar las circunstancias sanitarias y ponderar los dos derechos en juego: el derecho al voto y el derecho a la seguridad sanitaria", ha asegurado.

Con respecto al Parlament, ha explicado que habrá actividad parlamentaría normalizada durante los dos meses, teniendo en cuenta las medidas de limitaciones y restricciones por la Covid-19. Sobre la situación que se dará cuando quede disuelta la legislatura, ha señalado que el Parlament sigue en funciones con la Diputació Permanent y que, tal como establece el artículo 75 del reglamento, tiene entre sus funciones poder convalidar decretos del Govern relacionados con la Covid-19.