La tensión entre el president, Quim Torra, y la líder de Ciudadanos, Inés Arrimadas, va creciendo a golpe de pleno. Este miércoles, el jefe del ejecutivo ha exigido con contundencia a Arrimadas que "ejerza de líder de la oposición y deje de hacer espectáculo", y lo ha hecho en medio de un duro cara a cara que los escaños naranja han acogido entre protestas y los diputados independentistas han cerrado de pie aplaudiendo al president.

Discusió Torra Arrimadas Ciutadans Ple Parlamento - Sergi Alcàzar

La presidenta de Ciudadanos había reprochado previamente a Torra que le importan "un pimiento" los problemas sociales que sufren los catalanes y ha tildado de "vergüenza" el documento que ayer trascendió que había entregado al presidente Pedro Sánchez en la cumbre que celebraron el 20 de diciembre en el palacio de Pedralbes. "Cada día que pasa en la presidencia es un día perdido", ha reprochado.

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"Lo que es vergonzoso e indignante es que usted que es líder de la oposición no haga de líder de la oposición", ha replicado Torra. El president ha echado en cara a Arrimadas que la mesa de diálogo impulsada por el PSC en el Parlament se ha reunido dos veces y Ciudadanos no ha asistido a ninguna de las convocatorias, y ha acusado a Cs de no estar nunca cuando se trata de buscar soluciones a través del diálogo.

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Ante las protestas de la líder naranja, que ha mostrado de nuevo un cartel, esta vez la fotografía de un regidor de Cs que fue agredido, Torra ha reclamado: "Señora Arrimadas, un poco de respeto. Todo son excusas de mal pagador".

Torra ha concluido recordando que el día anterior Arrimadas le había tratado de xenófobo, racista y supremacista, cuando es Ciudadanos quien ha pactado con un partido racista, xenófobo y supremacista. Una conclusión que los diputados independentistas han acogido de pie y con aplausos.

Esta vez, además, el enfrentamiento no lo han protagonizado sólo Torra y Arrimadas, también se ha encontrado envuelto el presidente del Parlament, Roger Torrent, que ha querido frenar a la líder de la oposición cuando ha intentado intervenir en la forma cómo se realizaba el debate. "Quien controla el pleno soy yo", le ha advertido Torrent, lo cual ha provocado un nuevo frente de protestas de Cs que se ha quejado de que el rato que Arrimadas debatía con el presidente del Parlament no se han detenido los 2,5 minutos de que disponía para su intervención.

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Las protestas se han multiplicado en los escaños naranja al constatar que a Torra sí se le paraba el tiempo cuando Torrent ha tenido que intervenir para pedir silencio a la tribuna de invitados.

Los reproches entre Torra y Arrimadas han empezado ya antes del cara a cara. Mientras la líder naranja mostraba, hablando en voz alta y con gestos, su opinión ante las respuestas del president al resto de portavoces, Torra tampoco ha tenido inconveniente a replicarle durante el turno de respuesta a otros grupos. "Toda la sociedad internacional se está dando cuenta, señora Arrimadas, que aquí se están vulnerando los derechos civiles y los derechos humanos", ha advertido mientras respondía al portavoz de JxCat, Albert Batet.

Precisamente durante la respuesta a Batet, Torra ha anunciado que este fin de semana irá a visitar a los presos, antes de que empiece el juicio. El president ha coincidido con el portavoz de JxCat en denunciar que el traslado de los presos a Madrid fue una "indecencia", en "condiciones miserables" y para encontrarse una vez llegados al centro penitenciario con la "paranoia" de que les requisaban incluso los rotuladores amarillos. "Nos damos cuenta de que en estas condiciones es imposible que este juicio sea justo", ha remachado.

El president ha concluido que el Govern dará "una respuesta democrática y de derecho a la autodeterminación a las sentencias".