Armados con rollos de papel de váter, los manifestantes convocados por los CDR han llegado esta noche hasta delante de la sede del Departament d'Interior, en la calle de Diputació. La tensión, sin embargo, ha empezado rápido.
Un grupo de personas con las caras tapadas ha podido romper el perímetro de seguridad que blindaba la conselleria y los Mossos d'Esquadra han cargado y han disparado proyectiles de foam para detener la incursión. Es la segunda noche de enfrentamientos con la policía y de protestas por la sentencia contra los presos políticos por el 1-O.
Con la ayuda de furgonetas de la Brigada Móvil (BRIMO) y la colaboración de las unidades de orden público de la policía española, han echado a todos los manifestantes de paseo de Sant Joan. Pero a pesar de haber podido liberar la zona del departamento, las hogueras han empezado por todas las calles próximas.
Un detenido y fuego en cada calle
En cada esquina, los manifestantes han cruzado contenedores y han hecho hogueras. Los Mossos y la policía española han dispersado a los manifestantes a tiros y a porrazos hasta casi Arc de Triomf y Gran Via, donde han seguido los incendios. Según la policía, han quemado más de una docena de vehículos. Los Mossos d'Esquadra, hasta el momento, han detenido a una persona por los disturbios. Y la situación todavía sigue fuera de control, con barricadas de fuego en cada esquina.