Jordi Sànchez y Jordi Cuixart presentaron un recurso de amparo contra la decisión de la Audiencia Nacional de mantener su prisión preventiva. Sànchez presentó el recurso el 22 de noviembre por vulneración de derechos fundamentales y falta de garantías procesales, y pedía salir de la prisión para poder participar en los actos de la campaña electoral. Por este punto, la resolución llegará tarde, porque ni tan sólo se ha debatido el recurso, sino que sólo se ha admitido a trámite, y la campaña no sólo se ha acabado sino que ya hace más de un mes que se celebraron las elecciones.

El caso tampoco está ya en la Audiencia Nacional, sino que ha saltado al Tribunal Supremo. Los escritos que Sànchez y Cuixart son un primer paso, también, necesario para poder acudir al Tribunal Europeo de Derechos Humanos en caso de que el amparo no prospere.

El recurso de amparo interpuesto al TC se basa en tres motivos. El primero, la vulneración de derecho al juez ordinario después de que la Audiencia Nacional hubiera asumido su competencia en una "clara vulneración de la normativa procesal y en contradicción con su acta previa del 2008".

El segundo es la vulneración de garantías procesales por el hecho de que la jueza de la Audiencia Nacional Carmen Lamela justificara la prisión del expresidente de la ANC por motivos "no esgrimidos" por la Fiscalía.

El tercer motivo es la vulneración del derecho a la libertad porque Lamela no justificó "mínimamente" por qué razones entendía que existía un riesgo de fuga. El hecho de que el Tribunal Constitucional haya tardado más de dos meses en resolver sobre si admite a trámite o no el recurso resta posibilidades a la defensa, que apuntaba en este escrito a la Audiencia Nacional, cuando la causa ya se encuentra en manos del Tribunal Supremo.