"No hay normalidad mientras los 135 diputados del Parlament de Catalunya no puedan estar aquí. Hoy ellos (Puigdemont y Lluís Puig) no pueden estar aquí, ni en Montserrat, ni en Badia del Vallès," así de claro y rotundo ha reaccionado el president del Parlament, Josep Rull, ante la presencia de los reyes españoles, Felipe VI y Letizia, en Montserrat. Lo ha hecho en el marco del recibimiento de la Flama del Canigó este lunes en la cámara catalana, desde donde Rull también ha condenado los "ataques furibundos" a la lengua catalana, haciendo especial énfasis en las Illes Balears y el País Valencià, donde gobierna el PP y en el marco de la Diada de los Països Catalans.
Quien también ha sido muy contundente ante la presencia de Felipe VI en Catalunya es el presidente de Òmnium Cultural, Xavier Antich, quien ha reivindicado que "Catalunya no tiene rey". "Ni en Montserrat ni en ningún sitio", ha subrayado. "Fuera los Borbones de los Països Catalans", ha sentenciado el presidente de Òmnium Cultural, acompañado de miembros de Acció Cultural del País Valencià y Obra Cultural Balear.
El Parlament recibe la Flama del Canigó
La Flama del Canigó ha llegado al Parlament a eso de las doce del mediodía, escoltada por niños de Corbera de Llobregat. El acto ha sido acompañado por un baile de gigantes del mismo municipio y de la Agrupació de Colles Geganteres de Catalunya. La han recibido Rull, el conseller de Política Lingüística, Francesc Xavier Vila y la vicepresidenta de la cámara, Raquel Sans, así como varios diputados. Durante los parlamentos, Rull ha alertado de la situación "altamente compleja" que se vive en el País Valencià y en las Illes Balears y ha apelado a enfrentarse a este retroceso con "patriotismo". "Tiene que ser un patriotismo generoso, que nos permita poder salvar nuestras palabras y nuestra lengua", ha apuntado.
Por su parte, Antich ha recordado que la Flama del Canigó ha recorrido, un año más, más de 250 kilómetros para llegar a la cámara. "Eso es gracias a centenares de voluntarios que son el símbolo de la fuerza organizada", ha reivindicado el presidente de Òmnium, que ha añadido que cada hoguera que se enciende "es una trinchera de luz". "Celebramos una tradición, pero nos conjuramos colectivamente por unos países completos y libres, con la lengua y la cultura como pilares fundamentales y la solidaridad como bandera", ha reivindicado Antich. Así, ha hecho un llamamiento a no caer en "la resignación y el desánimo". "La Flama nos recuerda quiénes somos, qué queremos y por qué luchamos".
El recorrido de la Flama
La Flama del Canigó, que enciende las hogueras de la verbena de San Juan y que llega al Parlament desde 1980 —año en el que se restableció la institución—, también ha llegado a más de 300 puntos de los Països Catalans. Previamente, durante la noche del 22 al 23 de junio, la Flama ha sido regenerada en la cima del Canigó y desde la madrugada de hoy, centenares de equipos de fuego han iniciado las rutas que lo esparcen por todo el país. Así empieza, año tras año, la celebración de una fiesta ancestral vinculada al solsticio de verano, que es también un símbolo de hermandad entre los territorios de habla catalana.