Los partidos independentistas y Catalunya Sí que es Pot unen fuerzas para que los ayuntamientos catalanes donde tienen representación voten mociones a favor del referéndum, y conseguir así que la mayor parte del mapa municipal catalán sea soberanista.

Después de haber coincidido este jueves a las puertas del Parlament en apoyo a la presidenta de la cámara, Carme Forcadell, las formaciones independentistas, esto es, el PDECat, ERC la CUP y Demòcrates, y los partidos que contiene CQSP, vuelven a trabajar juntos para hacer posible el referéndum para Catalunya.

El objetivo es involucrar al mundo local en el derecho a decidir a partir del voto favorable a mociones que presenten estos partidos, a las que ha tenido acceso Europa Press, y como resultado, conseguir que el máximo de municipios catalanes den luz verde a la consulta sobre la independencia.

Aunque está por ver qué consistorios acaban apoyando a la propuesta, visto el rechazo frontal de PP, C's y PSC, los 6.000 concejales que tienen comunes e independentistas en los ayuntamientos del territorio garantizan que la mociones por la consulta se puedan votar en la práctica totalidad de localidades del país.

El impulso municipalista al que independentistas y comunes quieren dar impulso llega pocos días después del 12-O, cuando unos cincuenta ayuntamientos catalanes optaron por abrir sus puertas pese a ser el Día de la Hispanidad, hecho que está comportando disputas con la Delegación del Gobierno.

Independentistas y comunes se concentraron en el Parlament en apoyo a Carme Forcadell. Imagen: Sergi Alcàzar

Va de matices

La aparente unidad a favor del referéndum entre todas las ramas del soberanismo y el entorno de CQSP se empieza a resquebrajar cuando se pone lupa al camino que quieren recorrer los distintos partidos. Y es que cada uno ha preparado su particular moción.

El documento que más se diferencia del resto es el de los comunes y, también en esta ocasión, por la cuestión de la unilateralidad. En la línea del discurso de CQSP en el Parlament, el texto insta a trabajar por un referéndum con las máximas garantías que "busque el reconocimiento previo de la Unión Europea y de la comunidad internacional" para que la consulta tenga efectos jurídicos y políticos.

Por la parte independentista, la moción del PDECat manifiesta la voluntad de hacer "un referéndum vinculante sobre la independencia de Catalunya en septiembre del 2017 con una pregunta clara y una respuesta binaria".

La moción de ERC incluye que los municipios impulsarán debates constituyentes y facilitarán "los recursos y los espacios necesarios para el correcto desarrollo del debate ciudadano".

Demòcrates quiere comprometer a los ayuntamientos a crear "espacios de debate y propaganda electoral que garanticen la presencia de los argumentos del  y el no a la independencia en igualdad de condiciones".

El texto de la CUP todavía no se ha hecho público, pero se prevé que esté en la misma línea que los anteriores.

A pesar del evidente distanciamiento en muchas cuestiones, por otra parte, los textos del PDECat y los comunes comparten un aspecto: la voluntad de informar al Estado de la aprobación de las mociones, en caso de que se materialicen. Los primeros proponen comunicarlo al gobierno de Madrid, mientras que los segundos optan por hacerlo al Congreso y al Senado.

Con todo, se puede dar el caso que en todos los ayuntamientos con presencia de partidos pro-referéndum, como lo es el de Barcelona, se lleguen a votar hasta cinco textos diferentes sobre la misma cuestión.