"Las peores violaciones de derechos humanos en Europa occidental en las últimas décadas". Después de dar un repaso por los acontecimientos que han tenido lugar a Catalunya en estos últimos meses, el semanario alemán Stern entrevista hoy a un profesor de Filología Románica de la Universidad de Bremen Axel Schönberger, que asegura que el caso catalán ya llegó a Alemania tiempo antes de que detuvieran al president Carles Puigdemont.

El profesor compara directamente al presidente español, Mariano Rajoy, con el expresidente de Serbia Slobodan Milosević, que fue acusado por el Tribunal Penal Internacional para la Antigua Yugoslavia (TPII) de haber practicado crímenes contra la humanidad como "deportación, asesinato y persecución por motivos políticos y religiosos".

Citando a Lluís Companys, Schönberger recuerda que en 1940 fue torturado, pero también que la derrota militar de los Países Catalanes en la Guerra Civil española "sólo fue posible para los fascistas españoles liderados por Francisco Franco con una ayuda masiva logística, financiera, humana y material".

En este sentido, el profesor de la Universidad de Bremen se lamenta de que Alemania ha sido durante muchas décadas "un gran contribuyente a la represión del pueblo catalán y de la lengua catalana". Pero no todo fue durante la época de la dictadura franquista. Ahora, asegura, "los derechos humanos garantizados por la Carta de los Derechos Fundamentales de la Unión Europea han sido gravemente violados por más de siete millones de ciudadanos de la UE durante mucho tiempo".

Madrid y los derechos (no) humanos

A opinión de este docente, "es claramente innegable" que Madrid "ignora los derechos humanos en Catalunya" y, lo que es más, considera que estas "son las peores y masivas violaciones de los derechos humanos en Europa occidental desde las últimas décadas".

Según sostè Schönberger, estas violaciones van desde los "millones de controles ilegales a las llamadas de larga distancia, cartas y correos electrónicos y el rechazo del derecho humano colectivo a la autodeterminación sobre el ejercicio desproporcionado y excesivo de la violencia física a la restricción de los derechos humanos a la libertad de expresión, el derecho a la reunión pacífica y la percepción de sufragio activo y pasivo".

Precisamente por eso, se lamenta de que esta situación representa "un escándalo", pero critica que en España hay total impunidad para cargarse los derechos humanos de Catalunya, cosa que, subraya, "no representa ni un estado constitucional ni una democracia", motivo por|para el cual tira una pregunta en el aire y suelta que quien se piense que el Estado español es democrático, que se cuestione "si en los años treinta también se refería a la Alemania Nacional Socialista como tal".

Pacifismo Vs. Violencia

Schönberger, además, pone de relieve que Puigdemont siempre ha abogado por el diálogo, así como que "nunca ha respondido con violencia" y recuerda que, por ejemplo, a la jornada del referéndum del 1-O la violencia no provenía precisamente del electorado, sino de la policía española, a quién define como policías "reorganizadas bajo el franquismo al modelo de las SS".

De hecho, el profesor pone encima de la mesa que, aunque en Catalunya se habían prohibido las pelotas de goma, un hombre perdió un ojo por este motivo, pero, aun así, "ni el gobierno español ni el Tribunal Constitucional no hicieron nada para denunciarlo".

Un referéndum que considera "democrático" y un derecho humano básico en las democracias de verdad porque se trata, simplemente, del "derecho a decidir sobre el tipo de autodeterminación" y, por lo tanto, asegura que el referéndum no era ilegal en Catalunya y que lo que sí que lo era es el hecho de que el gobierno del PP intentara impedirlo de todas las maneras posibles.

¿Separación de poderes?

Y no sólo eso. Schönberger tiene claro que la separación de poderes en España "no es como la de Alemania" justamente porque "actualmente está suspendida" y, por lo tanto, considera que "no funciona en absoluto". Y es que, "de manera arbitraria", los de Rajoy y su justicia "derrotan la ley española de una manera imprevisible para los catalanes interesados", motivo por el cual recuerda las quejas de centenares de abogados españoles y profesores de derecho que se han quejado y han denunciado esta situación.

Como ejemplo, explica que el Tribunal Constitucional "toma sus propias decisiones como base para el enjuiciamiento de los políticos, especialmente si en el derecho penal español no ha habido ningún delito". Precisamente por eso, asegura que todos los catalanes perseguidos por motivos políticos en España "tienen derecho de asilo en Alemania".

El problema, sin embargo, es que ahora muchos líderes independentistas están encarcelados, mientras "la mayoría de los políticos sospechosos de corrupción son libres de moverse libremente por cualquier lugar" y recuerda que, incluso, Rajoy "está bajo sospecha". Ahora bien. Mientras ellos se van librando, los dirigentes soberanistas están a la prisión, al exilio o encausados y pendientes de juicio.