El grupo parlamentario del PSC-Units ha solicitado en la Mesa del Parlament que estudie una posible sanción al portavoz de Vox en la cámara catalana, Joan Garriga, por acusar a los socialistas de "gastarse el dinero en drogas y putas". El diputado de extrema derecha hizo estas declaraciones en el pleno del pasado 8 de mayo durante el debate de una moción de Vox sobre los empadronamientos. Aunque el presidente del Parlament, Josep Rull, ya llamó la atención a Garriga en el acto, los socialistas quieren que vaya más allá e investigue un posible incumplimiento del código de conducta de la cámara, con las pertinentes sanciones que eso supondría.

"Financiación ilegal es el que ha hecho el bipartidismo durante años, y corrupción es gastarse el dinero en drogas y putas como han hecho los socialistas", lanzó el portavoz de Vox en la cámara legislativa catalana, Joan Garriga. Después de estas palabras, Rull llamó la atención al diputado, señalando que "esta no es la manera en la cual un diputado del Parlament tiene que expresarse". Desde el PSC, por su parte, consideran que las acusaciones de Garriga "son extraordinariamente graves e injuriosas" y que "lesionan la dignidad moral" de los parlamentarios socialistas.

"Se trata de unas expresiones que no solo vulneran el debido respeto institucional y la decencia parlamentaria, sino que desvirtúan el debate público, resultan totalmente incompatibles con la legítima crítica política y son susceptibles de vulnerar" artículos del código de conducta y del reglamento del Parlamento, alega el grupo parlamentario del PSC-Units en su escrito a la Mesa de la cámara legislativa catalana. La Mesa, por su parte, pedirá un informe a la Comisión del Estatuto de los diputados para que examine los hechos y tomar una decisión. Esta comisión la preside ahora mismo la diputada de Junts Judith Toronjo.

Amonestación o multa de hasta 12.000 euros

Los socialistas quieren que se estudie si se ha infringido el código de conducta. En este sentido, el artículo 7 del código del Parlament, sobre la "actitud ejemplar", establece que los diputados tienen que mantener "en todo momento" una conducta "respetuosa y escrupulosa y ejemplar" con los otros diputados y con la ciudadanía. Así, el régimen sancionador del código de conducta de los diputados contempla que la sanción pueda ser una amonestación pública o una multa de 600 a 12.000 euros. Además, si la Mesa considera que la infracción es muy grave, puede proponer al pleno que acuerde la suspensión temporal del ejercicio de la función parlamentaria mientras el diputado o diputada no resuelva la situación de incumplimiento.