La imagen de miles de personas entrando a pie en Barcelona desde los diferentes puntos cardinales del territorio catalán es una de las estampas del año. La repercusión de las Marxes de la Llibertat contra la sentencia del juicio al procés tuvo resonancia internacional, y cuando es momento de hacer el balance anual informativamente hablando, el influyente diario Politico lo ha incluido en su resumen de hechos destacados.

El influyente diario político también incluye el colapso del aeropuerto del Prat el 14 de octubre, la primera acción de protesta cívica convocada por Tsunami Democràtic. Y todavía una tercera fotografía, la de activistas encapuchados tras las vallas mecánicas en la semana de disturbios enfrentándose a los cuerpos de seguridad.

El resumen fotográfico equipara las protestas catalanas con otros movimientos ciudadanos por todo el mundo, como la de los Chalecos Amarillos en Francia, la de los estudiantes en Hong Kong y las revueltas contra el encarecimiento —en un inicio— de los precios en Chile.

Marxes per la Llibertat

Tres días andando. Más de 500 kilómetros en total. Dos noches en casas, polideportivos —cedidos por los ayuntamientos— y hostales de todo Catalunya. Coincidiendo con la huelga general del 18-O, decenas de miles de manifestantes confluyeron en la capital catalana por las columnas que salieron de Tàrrega, Tarragona, Berga, Vic y Girona. Las dos primeras se juntaron en Martorell después de la primera etapa. Las de la Catalunya Central, en Sant Quirze del Vallès. Y, junto con la de Girona, llegaron tres días más tarde como una ola humana gigante en Barcelona por las principales arterias de entrada a la ciudad.

El Tsunami colapsa el aeropuerto

El aeropuerto del Prat fue el epicentro por un día de la protesta contra la sentencia. Desde que a la una del mediodía Tsunami Democràtic anunció la movilización al aeropuerto miles de manifestantes se dirigieron allí con su vehículo, en transporte público o a pie. Unas 8.000 personas ocuparon las instalaciones de esta insfraestructura. El bloqueo provocó que la Audiència Nacional abriera una investigación por organización criminal e indicios de terrorismo contra Tsunami Democràtic.

Semana histórica de disturbios

La publicación de la sentencia del procés, con penas de 9 a 13 años de prisión para los líderes independentistas, provocó olas de indignación en Catalunya que se tradujeron en una semana de protestas históricas. El martes día 15 empezaron los disturbios nocturnos en la ciudad de Barcelona, que al día siguiente se trasladaron a la conselleria de Interior. El jueves grupos de ultraderecha protagonizaron agresiones y el viernes —día de huelga general— se produjo la batalla campal de Urquinaona. El sábado fue un día de ánimos más calmados y el domingo la delegación del Gobierno en Barcelona se convirtió en un vertedero de basura.