La prensa francesa ha seguido de cerca las negociaciones y la formación del gobierno municipal de Barcelona. La presencia de su antiguo primero ministro y ahora concejal, Manuel Valls, hace que lo que pase en la capital catalana despierte el interés más allá de los Pirineos, aunque no sea con especial simpatía.

Este sábado, algunos de los principales diarios franceses como son Libération y Le Figaro han publicado crónicas propias sobre la jornada. En el caso de los primeros, el titular ya es toda una declaración de intenciones: "En el Ayuntamiento de Barcelona, el perdedor es el ganador, gracias a Valls".

El rotativo explica cómo el "inesperado apoyo de Valls y un acuerdo con los socialistas" ha hecho a Ada Colau alcaldesa aunque "perdió las elecciones municipales en favor de Ernest Maragall". "Ada Colau, próxima a la izquierda radical, fue reelegida con 21 votos", apuntan.

En cuanto a Valls, destacan el "revés" que sufrió en las elecciones municipales "quedando sólo en cuarto lugar" y hablan de la oferta "de su apoyo incondicional [a Colau] para bloquear el camino a Maragall". "Con la reelección de Ada Colau, Barcelona es una de las últimas fortalezas municipales mantenidas por Podemos y sus aliados, que habían conquistado en el 2015 varias ciudades españolas importantes como Madrid y Barcelona", concluyen, después de hacerse eco también de la tensión fuera del pleno y de la presencia de Joaquim Forn.

"Duramente derrotado"

Le Figaro ya pone la mirada más allá de la constitución del ayuntamiento y se fija en las intenciones de Valls a partir de ahora. "Después de su derrota, Manuel Valls todavía sueña con un futuro catalán", titula, refiriéndose a Valls como "uno de los principales perdedores de las elecciones municipales españolas".

"Un exprimer ministro que desembarcó en un país vecino para, según decía, evitar la independencia de Catalunya y el populismo de izquierdas... duramente derrotado, en cuarto lugar por detrás de estos dos grandes adversarios y, peor, de un partido socialista catalán hasta ahora moribundo", ironizan.

Con su apoyo a Colau, Valls "ha vuelto al centro del juego", apuntan, destacando que todo eso tiene lugar "unos cuantos meses antes de las elecciones catalanas previstas a finales del 2019 o principios del 2020". "Sin él el independentista Ernest Maragall, que quedó primero, habría conseguido el ayuntamiento. Con él y en contra de la opinión del partido que da apoyo a su lista (Cs), Colau podrá ser investida para un segundo mandato".