Junts per Europa cerrará este miércoles su oficina en el Born de Barcelona por motivos económicos. La formación ha informado que más adelante abrirá "en un nuevo espacio". Afrontar el coste del local actual, que se encuentra a pie de calle en el barrio barcelonés y que se inauguró en octubre del 2021, hacía necesarios los recursos que el Parlamento Europeo ofrecía para gastos de oficina de los tres europarlamentarios que Junts tuvo la legislatura pasada: Carles Puigdemont, Toni Comín y Clara Ponsatí. A las últimas elecciones europeas, Junts solo obtuvo un escaño y el presupuesto para gastos de un solo eurodiputado no permiten continuar con la oficina abierta, según han explicado fuentes del partido a ElNacional.cat. Hay que tener en cuenta, además, que Comín todavía no ha podido tomar posesión del cargo.
La oficina de los eurodiputados ha tenido como objetivo estos últimos dos años ser el enlace directo con sus votantes a pesar de la persecución judicial del Estado. El responsable de la oficina ha sido Aleix Sarri, que en los últimos comicios iba en la lista de Toni Comín. Carles Puigdemont renunció a la reelección para presentarse como candidato de Junts a la presidencia de la Generalitat, mientras que Clara Ponsatí iniciaba una aventura política alternativa a Junts con una nueva formación, Alhora.
Veto en Comín
El Parlamento Europeo se constituyó el julio pasado sin Comín, aunque había obtenido suficientes votos para ser eurodiputado. Es la segunda vez que el dirigente independentista no puede empezar la legislatura a pesar de ser electo en unos comicios en la Eurocámara. En el 2019 tampoco pudo entrar el primer día con el ahora exeurodiputado y presidente en el exilio, Carles Puigdemont.
A principios de julio, la Eurocámara dejó vacante el escaño Comín, después de que la Junta Electoral Central (JEC) publicara su lista final de eurodiputados españoles sin el dirigente independentista por no haber acatado la Constitución. Según fuentes parlamentarias, la Eurocámara se quiere esperar a la sentencia final del TJUE por la controversia con respecto a las condiciones que pone España para declarar como candidatos electos a los representantes elegidos en las urnas.
Aunque el TJUE estableció en el caso de Oriol Junqueras en el 2019 que la condición de eurodiputado se adquiere en "la misma elección", el Tribunal Supremo avaló que la JEC exija el juramento de la Constitución como condición indispensable para entrar a la lista de eurodiputados que España envía en la Eurocámara, tal como consta en la Ley Orgánica del Régimen Electoral General (LOREG).
Como hay una disputa legal pendiente de ser resuelta en Luxemburgo, la Eurocámara presidida por Roberta Metsola ha optado por seguir el criterio de España y ha vetado Comín como eurodiputado a la espera del dictamen final del TJUE el próximo 26 de septiembre. Ahora bien, el TJUE se puede pronunciar antes sobre la petición de medidas cautelarísimas de Comín, que exige acceder al cargo antes de la resolución judicial final de forma preventiva.