El economista Santiago Niño Becerra ha manifestado que los expertos de los diversos países de la UE sabían "con pelos y señales" las consecuencias que tendrían las sanciones a Rusia y que han derivado en una crisis energética, y se ha preguntado en este sentido por qué no se informó a la población. "Cada día en Europa se publican y emiten previsiones casi apocalípticas de la situación industrial y social que se generará a partir del otoño por la escasez de energía. No sé si son anuncios o advertencias, pero todas estas previsiones incorporan un punto de sorpresa, como si nadie esperara que fuera así a pesar de lo que se está publicitando. Veamos. Cuando un Gobierno o un conjunto de gobiernos toman una batería de decisiones: las sanciones a Rusia, todos los gobiernos, sobre todo los de países que están desarrollados, han tenido que recibir varios informes elaborados por potentes gabinetes de estudio que analizan y detallan las consecuencias directas e indirectas que estas decisiones tendrán. En otras palabras, cuándo estas decisiones fueron adoptadas se sabía con pelos y señales lo que pasaría", ha asegurado.

Por eso, el economista considera que no es creíble que ahora se hable de sorpresa por lo que está pasando, porque implicaría un desgobierno. "¿Por qué la sorpresa? Y ojalá haya sido así [que los gobiernos ya preveían que pasaría lo que pasa], porque si no se sabía entramos en una galaxia de improvisación y falta de rigor que eriza el pelo, improvisación y falta de rigor de los gobiernos que nos gobiernan". "Eso es tan distócico que ni siquiera quiero imaginarlo. Pero entonces, como se sabía, ¿por qué no se informó a las ciudadanías de las consecuencias que estas decisiones tendrían y de los efectos de que tendrían en los ciudadanos?", se ha preguntado.

 

La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, ha propuesto como medida contra la crisis energética que los Estados miembros de la UE ahorren un 10% de electricidad, y al menos un 5% en horas con pico de demanda. Es una de las medidas que está previsto que se cierre en una reunión extraordinaria el 30 de septiembre con los ministros de Energía de los países de la UE. "Quiero que nuestra Unión tome ejemplo de su gente. Reducir la demanda en las horas punta hará que el suministro dure más tiempo, y hará bajar los precios", ha dicho Von der Leyen, que ha añadido que "millones de europeos necesitan ayuda" en el ámbito energético.

Si las facturas energéticas europeas están disparadas, es en buena parte por la dependencia de muchos de sus países del gas ruso, especialmente Alemania. Por eso, Von der Leyen también ha insistido en la necesidad de Europa de reducir la dependencia del gas ruso. "Nos tenemos que librar de esta dependencia en toda Europa", ha manifestado Von der Leyen, y ha insistido en que por eso acordaron el almacenaje conjunto.