La misma semana en que el Parlamento de Catalunya ha reconocido el derecho del presidente Carles Puigdemont a ser investido, a raíz de las resoluciones aprobadas por JxCat, ERC y la CUP, el presidente Artur Mas se cuestiona si es el momento de hacerlo. En una entrevista al programa 'Vía Libre' de RAC1 ha dicho que "investir ahora a Puigdemont comportaría abrir más procesos penales contra más personas. Lo que se tiene que valorar es si eso en este momento vale la pena después de tener tanta gente fuera del país o no hace falta". Sin embargo ha reconocido que Puigdemont "tiene toda la legitimidad para ser investido presidente. Es de una evidencia total. Pero a veces la legitimidad no se acaba imponiendo en el corto plazo".

Artur Mas ha reconocido que "hace mucho tiempo" que no habla con Carles Puigdemont "porque hay un problema de seguridad en las comunicaciones" y que la única manera que tiene de hablar es "por vías indirectas, por personas interpuestas."

En una entrevista en motivo del medio año del referéndum del 1 de octubre, Artur Mas ha dicho que es pronto para "calibrar en el corto plazo" si valió la pena, aunque "es evidente que no hay unas ganancias a corto plazo". "Si se mira ahora hay instituciones que no están bajo nuestro control que están intervenidas para|por Madrid". "Ante esta situación es evidente que no hay unas ganancias directas a corto plazo. Todos estos procesos tienen siempre sus costes. Y eso se había dicho|llamado siempre", ha dicho

Artur Mas ha reconocido que no se habría imaginado nunca "esta actuación de radicalidad y visceralidad por parte del estado español. Eso no quiere decir que no era evidente que habría un proceso penal". El presidente ha hecho, nuevamente, un llamamiento al diálogo político porque "un problema político se resuelve desde la política y los criminales desde la justicia"; y ha reconocido que si no hubo negociación con el estado español "es porque en ningún momento el gobierno español quiso sentarse en una mesa a hablar". Mas ha dicho que le consta que Carles Puigdemont intentó hablar de cómo hacer el referéndum con el gobierno de Mariano Rajoy pero que la única respuesta que obtuvo fue: "eso no se tiene que hablar".

Sobre el futuro de Catalunya no ha querido hablar de ni de fechas ni de plazos porque "este es uno de los problemas que hemos tenido, la necesidad de fijar plazos concretos". "Lo importante no es cuántos años tardaremos. Lo importante es si vamos o no en la buena dirección".