El Gobierno todavía intenta arreglar las palabras del secretario de Estado de Seguridad, que aseguró que la comisaría de Via Laietana de Barcelona era un "símbolo de servicio público" durante generaciones. Este martes, la cuestión ha vuelto a estar presente, durante el pleno del Senado, después de que ERC haya defendido una vez más su reconversión en museo de memoria histórica. En respuesta, el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, ha admitido que "en el pasado", durante la dictadura franquista, fue un centro de tortura. Pero también ha defendido que la tarea actual de la Policía Nacional ya "resignifica" el edificio.

La senadora de ERC, Adelina Escandell, ha aprovechado la sesión de control para recordar al ministro del Interior que en la comisaría de Via Laietana se llevaron a cabo "torturas sistemáticas organizadas desde el poder contra la gente que defendía los derechos civiles y democráticos". Y ha vuelto a reclamar el traspaso del edificio, para poder darle otro significado. "El Ayuntamiento, la Generalitat y las entidades piden el edificio, y nosotros seguiremos trabajando", ha insistido Escandell. De hecho, es una de las exigencias de los republicanos para la nueva ley de memoria democrática.

Pero Marlaska ha negado la mayor: no cree que el traspaso de la comisaría a instituciones catalanas para hacer un museo sirva para reparar el pasado de la jefatura. Y ha remachado su argumento: "Porque no hay mejor resignificación de un lugar que fue un punto de tortura que la tarea que hacen hoy la Policía Nacional vestida con valores democráticos, constitucionales y luchando contra la violencia y contra el odio".

Por otra parte, el ministro del Interior también ha defendido al secretario de Estado de Seguridad, Rafael Pérez Ruiz, después de que dijera que había sido un "símbolo de servicio público" y de democracia durante "generaciones". Ha argumentado que lo que quería decir su número dos es que la Policía Nacional había sido, durante el periodo democrático, "una de las instituciones mejor valoradas".

"En democracia lo mejor es seguir resignificando estos edificios con la tarea día a día de las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado", ha defendido Fernando Grande-Marlaska. "El gobierno considera que cualquier conmemoración de la represión, la tortura o el autoritarismo es incompatible con la democracia", ha concluido.

Las palabras del secretario de Estado

El secretario de estado de seguridad, Rafael Pérez Ruiz, aseguró la semana pasada que la sede central de la Policía Nacional en la Via Laietana de Barcelona "ha sido y es un símbolo de servicio público desde la cual varias generaciones de policías han contribuido y siguen contribuyendo a fortalecer la democracia". Pérez Ruiz también aseguró que la Policía Nacional es una de las instituciones más valoradas por los ciudadanos y se mostró convencido de que los catalanes agradecen su trabajo "abnegado y silencioso". El número 2 del Ministerio del Interior lo dijo durante la celebración del patrón de la Policía Nacional en Barcelona, donde se entregaron decenas de condecoraciones a policías y civiles.